En busca del 'petróleo' solar

En Andalucía existen en la actualidad 86 proyectos de plantas termosolares, en diferentes estados de desarrollo y actividad, que sumarán en tres años un total de 3.900 MW (megavatios) de potencia instalada y que convertirán a la región en líder europea en generación de electricidad mediante esa tecnología. La producción eléctrica en este tipo de centrales evitará la emisión a la atmósfera de más de 3,1 millones de toneladas de CO2.

Este tipo de tecnología -helióstatos, discos parabólicos, cilindroparabólicos, y mixta- ha dado lugar a que Andalucía sea pionera y cuente en la provincia de Sevilla con la mayor y más avanzada planta de energía termosolar por concentración de torre con helióstatos planos del mundo. La reciente visita del presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, ha puesto sin embargo de manifiesto las dificultades que la implantación de este tipo de tecnología está teniendo por las fuertes presiones de los lobbies de los productores de energías fósiles.

El sector pide más potencia y plazos para desarrollar la energía termosolar

La empresa Abengoa requirió durante su visita al presidente Zapatero la reforma y la adecuación de un marco legislativo más seguro y estable que permita el desarrollo de este tipo de centrales sostenibles con el medioambiente y la inversión en investigación de nuevas tecnologías que las hagan aún más eficientes.

Actualmente las tecnologías termosolares se rigen básicamente por un decreto, que regula el precio de venta de la energía generada en instalaciones acogidas a este régimen especial y el procedimiento a cumplir para acogerse a dicho precio de venta, que está primado o subvencionado. Además, este real decreto incluye un objetivo de potencia, de forma que una vez se alcance, quedaría fuera del ámbito de esta regulación el precio de venta de la energía producida. Esto implica que si no hay una ampliación de objetivos de potencia o una nueva regulación, el precio de venta de la energía eléctrica producida por estas centrales quedaría supeditado al precio de mercado, sin ninguna prima por ser generada con energías renovables, lo que la haría hoy por hoy inviable.

La petición de Abengoa a Zapatero iba en ese sentido. La viabilidad económica de las centrales termosolares está aún muy ligada a la retribución considerada en este Real Decreto, porque ésta tecnología todavía no está lo suficientemente desarrollada como para poder ser competitiva en el régimen ordinario con las derivadas del petróleo. Por ello, si se alcanzara rápidamente la potencia objetivo establecida a día de hoy -con la consecuente disminución o desaparición de la retribución o prima-, se bloquearía el desarrollo de esta tecnología y la implantación de centrales.

Actualmente el objetivo indicado en el Plan Nacional de Energías Renovables 2005-2010 es de 500 MW para el 2010. Por consiguiente, el objetivo de potencia indicado en el Real Decreto son esos 500 MW, a partir de ahí no habrá primas. Para Andalucía, hay una potencia asignada de 250 MW. Y está previsto, que en la comunidad se alcancen en 2011 los 3.900 MW. Para un año antes, 2010, sólo Andalucía podría contar con 600 MW termosolares, y 1.000 MW en España.

Por este motivo, tanto desde el sector solar como los defensores de las energías renovables, se solicita al Gobierno, con el fin de respaldar este tipo de tecnologías de generación distribuida y limpia, que se comprometa en la definición de mayores objetivos de potencia y a más largo plazo, para que se pueda desarrollar la tecnología termosolar hasta que alcance un grado técnico-económico de madurez competitivo.

Por otro lado, Andalucía se ha convertido en la región con más instalaciones de energía solar de baja temperatura, utilizada para obtener agua caliente sanitaria. En total, a finales de 2007, Andalucía tenía 394.817 metros cuadrados de paneles solares instalados, casi el 40% del total nacional. Sólo en el último año se instalaron 47.000 metros cuadrados de ellos. Y es que las provincias andaluzas disponen de una media de 3.000 horas de sol al año, un porcentaje muy superior a zonas como por ejemplo la cornisa cantábrica en donde se registran sólo 1.700 horas anuales. Asimismo, Andalucía cuenta con una potencia instalada de 46,3 MW de energía solar fotovoltaica, en instalaciones concectadas a la red, además de 6.231 kwp de instalaciones fotovoltaicas aisladas, que han resuelto el problema de viviendas a los que la red eléctrica convencional tenía difícil acceso.