Los realojados en Pontevedra temen por su integridad

Alrededor de 400 personas se concentraron ayer en la Plaza de Europa de Monte Porreiro (Pontevedra) para protestar por el realojo de 3 familias gitanas procedentes de O Vao. Entre tanto, en el edificio de la calle Alemania, donde residen dos de ellas, no sólo las persianas permanecían bajadas sino que también habían echado la verja que precede al portal. Según los mediadores, los realojados han percibido que en los últimos días se ha agravado el clima de hostigamiento y por eso ayer decidieron recoger sus cosas a primera hora para no volver hasta la noche. "Se fueron porque no querían enturbiar más aún el ambiente pero también porque empiezan a tener miedo", explicaron.

La asociación convocante, O Mirador, solicitó ayer por registro que se precinte este inmueble porque "todavía" ven "actuaciones" que incumplirían la paralización de las reformas ordenada por el gobierno local. El presidente de la agrupación, Ángel Mario Lago, indicó que llevarán a la Fiscalía el contrato suscrito entre el Ayuntamiento de Poio y la Consellería de Vivenda porque "hay indicios de que no se ajusta a la legalidad". Lago realizó estas declaraciones al frente de la concentración. El miércoles, junto a vecinos de Ponte Caldelas, repetirán frente al Ayuntamiento de Poio y está prevista su asistencia al pleno de este municipio y al de Pontevedra.