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Álava asegura que el 50% de los internos del centro Zabaltzen supera los 18 años

La Diputación de Vizcaya silencia el destino de los menores de Arcentales

La Diputación de Álava achacó ayer la saturación del centro de menores Zabaltzen de Vitoria a que 15 de los 28 internos actuales superan los 18 años, aunque su documentación indica que no llegan a esa edad. El teniente de diputado general, el peneuvista Claudio Rodríguez, explicó que la sospecha se basa en "una prueba ósea que ha realizado Osakidetza a petición de la Diputación para conocer la edad real de los usuarios de este centro de acogida".

Estas declaraciones llegan después de que los monitores del centro, el único de Álava para menores inmigrantes, denunciasen públicamente las condiciones de hacinamiento y provisionalidad en que viven los jóvenes desde hace año y medio. El centro abrió sus puertas en junio de 2003 de manera provisional en unas dependencias de la Cruz Roja.

El protocolo de entrada en el centro constata que los cerca de 200 jóvenes que han vivido en Zabaltzen han pasado por dicha prueba. Se trata del conocido como Atlas de Greulich y Pyle, que se empleó por primera vez en EEUU con jóvenes de raza blanca y clase alta. Después se elaboró una tabla de referencia para Europa. La medición se efectúa con datos antropométricos de las manos y las muñecas. Los jóvenes de cuya edad sospecha la Diputación proceden del África subsahariana, zona del mundo sin referencias en este método. Diferentes estudios científicos recomiendan que no se emplee sólo dicho atlas en mediciones óseas.

Además de las dudas que pueda ofrecer este sistema, en la normativa de entrada al centro de acogida se impone la documentación oficial: pasaporte o partida de nacimiento con fotografía, como exige la ley de Extranjería. Todos los menores que se encuentran en el centro Zabaltzen la cumplen.

Traslados en Vizcaya

Claudio Rodríguez aludió a la laxitud de esa normativa. "La ley de Extranjería deja demasiados flancos abiertos, por lo que pedimos que se vayan cerrando, ya que nos pone a todos en un compromiso", apuntó en referencia a que prima la documentación oficial sobre la prueba ósea.

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El centro Zabaltzen se abrió para atender a 12 menores inmigrantes, con una infraestructura mínima: sólo cuenta con una ducha, tres lavabos, tres tazas de váter y 12 camas. Desde hace año y medio, residen allí alrededor de 25 jóvenes, de los que 13 dormían en esterillas hasta que los monitores revelaron hace una semana esta situación, después de intentar solucionarla de forma reservada con los responsables del Instituto Foral de Bienestar Social.

Ahora, sólo dos menores siguen durmiendo en el suelo. El resto de los problemas (15 de ellos comen y cenan en el comedor social de Desamparadas y pasan el día fuera del centro) se mantienen. Rodríguez confirmó ayer que se abrirá un nuevo centro en Vitoria en torno al próximo verano, aunque no detalló su ubicación.

Mientras, los 22 menores del centro de acogida de Arcentales, en Vizcaya, han sido trasladados provisionalmente a otro lugar, cuyo ubicación no quiso precisar la Diputación. La instalación sufrió un incendio en la noche del domingo, que causó tres heridos leves y dañó dos habitaciones. Aún no se ha identificado al causante del siniestro, pero se sospecha de algún menor interno. El presidente del comité de empresa de la Diputación, Aniceto Prieto, criticó ayer el hacinamiento de los centros de inmigrantes y enfatizó que los proyectos en Urduliz y Erandio fueron rechazados "por alcaldes que son del PNV".

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