"Aún no pienso en la NBA"

Rudy Fernández, fiel a su imagen de jugador ambicioso y ganador, salió abrazado a su amigo Ricky y a todo el equipo. Pero tras la euforia inicial por el título de Copa se conjuró para que el equipo verdinegro mantenga la misma línea y alcance también el título de Liga. Luego probablemente le espera la NBA, los Blazers de Portland, ya que el contrato por el que renovó con el Joventut hasta 2013 así se lo permite.

Rudy es el primer jugador que consigue ser nombrado mejor jugador de la Copa por segunda vez desde que se instituyó el trofeo en 1990. La anterior vez que lo consiguió fue en 2004 en la final disputada en Sevilla y en la que el Joventut perdió precisamente ante el Tau. "Aquello queda muy atrás. Lo que importa es que hayamos ganado el título. Yo aún no pienso en la NBA", dijo Rudy.

El jugador siempre echa balones fuera cuando se le habla de los Blazers, el equipo que lo eligió en el 24º lugar del último draft, pero en su mente está dar el salto y reunirse posiblemente allí con Sergio Rodríguez. Jordi Villacampa, el presidente del Joventut, y Aíto García Reneses, el entrenador, consiguieron convencerle el pasado verano para que no aceptara la oferta del Barcelona y para que permaneciera un año más en Badalona. La elección ha dado sus primeros frutos.

Rudy (Palma de Mallorca, 1985) continúa mejorando día a día como jugador. Después de superar una lesión ya se ha situado en la Liga como el segundo jugador mejor valorado, sólo superado por Marc Gasol. Tras haber sido distinguido por la FIBA como mejor jugador joven y por la Euroliga como el de mayor progresión y tras conquistar el Mundial y el subcampeonato de Europa con la selección española, su objetivo es mejorar como jugador. Uno de los aspectos que desea mejorar no afecta estrictamente al juego sino a su carácter, —"debo controlar un poco más mi explosividad"— y a su físico liviano: "Debo ganar unos kilos".

El triunfo de Rudy fue también el de Ricky, el jugador de 17 años al que su propia afición le canta con sorna: "Ricky, Ricky, abusón" y por quien no hay día que le pregunten a Pepu Hernández. En Vitoria, alguien bromeó con el seleccionador español: "La pregunta no es si va a llevarle este año a los Juegos Olímpicos de Pekín, la pregunta es a quién llevará además de él". Los tres partidos que ha disputado en la Copa han refrendado su madurez y tremenda categoría. Ahora trabaja para mejorar en el tiro. Junto al estadounidense Mallet ha formado una pareja de bases estupenda, insuperable, especialmente decisiva en la final frente a la oposición de Prigioni y de Planinic.

El Joventut maravilló por su juego y su entrenador, Aíto García Reneses, que con cinco se convierte en el entrenador en activo con más títulos de Copa, salió contento como unas pascuas: "Estamos orgullosos, primero por habernos clasificado y después por haber conseguido vencer al TAU en su cancha", sentenció el técnico madrileño.

Aíto no consiguió esquivar los halagos dirigidos al juego desplegado por su equipo durante el torneo ("puede ser bueno para el baloncesto que haya un estilo alegre como el nuestro", admitió), pero el entrenador verdinegro también recalcó que el título, aunque "maravilloso", debía aprovecharse para "sacar el máximo rendimiento del equipo".

Y no abandonó su pragmatismo habitual pese a la euforia desatada por el triunfo. "Espero que este título nos sirva para crecer, y que podamos dar un paso más grande en todos los aspectos, con el apoyo de todos y también contar con un mayor presupuesto", aseguró.