Los beneficios del Banco de Valencia aumentan un 19,85%

El Banco de Valencia cerró 2007 con un beneficio neto consolidado de 135,8 millones de euros, un 19,85% más que el ejercicio anterior. Los resultados, según explicó su presidente, José Luis Olivas, superan los retos que se había planteado el banco, pese a haber sido 2007 "un año especial". Olivas enumeró diversos factores que han incidido de distinto modo en los resultados, como el incremento del 3% del Producto Interior Bruto en la Comunidad Valenciana, que "ha tirado del volumen del negocio", aunque las condiciones cambiaron en último trimestre de forma "drástica".

La entidad alcanza un volumen de negocio de 33.800 millones de euros

La desaceleración impone criterios de prudencia en los créditos

En ese sentido, se refirió a la desaceleración del sector inmobiliario, que en el tramo final del año llegó a la "casi paralización", y al aumento de los tipos de interés, a la crisis de liquidez en los mercados internacionales y a la subida del precio del petróleo, que apuntan hacia la moderación de expectativas en el próximo ejercicio.

El banco ha experimentado un incremento del 35% de su margen de explotación típicamente bancario y superó los 33.800 millones de euros de volumen de negocio con un incremento interanual del 23,84% (más de 6.500 millones de aumento). Olivas también destacó el crecimiento del crédito neto a la clientela, que se situó en el 25,25%. A ese aumento, que alcanzó los 17.448 millones, contribuyeron los préstamos hipotecarios para adquisición de vivienda, que crecieron un 27,78% y que suponen más del 59% de la inversión.

Pero 2007 también trajo un repunte de la morosidad, que aparece por primera vez después de 15 años, hasta el 0,62%. El consejero delegado del Banco de Valencia, Domingo Parra, subrayó que este dato se sitúa por debajo del sector, que está en una media del 0,90%. La morosidad se dio en mayoría en hipotecas de los últimos años y en financiación al consumo, mientras que fue de "normalidad" en las empresas. Parra destacó que la cobertura para insolvencias está por encima del 300%, cuando la de otros bancos es del 200%.

Respecto a la prudencia que se ha impuesto en los bancos respecto a las concesiones de crédito a la vivienda, el consejero delegado justificó que un marco de desaceleración "un tanto duro" impone criterios de prudencia, y advirtió de que solo cambiarían "cuando el entorno sea más favorable". Parra también rebajó las expectativas de la inversión crediticia para 2008 al 10% o el 12%.

El consejo de administración del banco decidió proponer a los accionistas un aumento del dividendo con cargo a 2007 del 90%.