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Reportaje:

Rijkaard protege a Deco y Ronnie

El entrenador interpeló a la plantilla: "Quien no se crea sus lesiones, que lo diga"

Jordi Quixano

A Deco y Ronaldinho no hay quien les tosa. O eso defiende Frank Rijkaard, técnico del Barcelona, que adopta una posición proteccionista y paternal hacia ambos. "¡Si hay alguien que no se cree la lesión de Deco y de Ronnie, que lo diga!", gritó el holandés el pasado jueves durante el almuerzo de la plantilla en el hotel de Sevilla, horas antes de jugar la ida de los octavos de final de la Copa (1-1), según publicó ayer el diario Sport. Los jugadores, sospechosos de haber lamentado sotto voce la falta de integración de Ronnie y Deco, ni replicaron ni rechistaron al técnico, que dio por zanjado el asunto. Pero la situación resulta espinosa. Tanto que ayer los capitanes del equipo pidieron explicaciones al mensajero. No para desmentirle, sino para saber quién había oficializado públicamente la ruptura en la plantilla.

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El club azulgrana, cuestionado al respecto, no ha negado que el hecho se produjera. Tampoco ha hablado Marc Ingla, vicepresidente deportivo, que la semana pasada afirmó estar al quite de cuanto sucede en el vestuario. Rijkaard sí que defendió la integridad deportiva y profesional de los jugadores, pese a que han perdido su condición de pilares básicos, han sido suplentes en varios encuentros y han estado lesionados en otros -Ronnie ha participado en 17 de 27 partidos; Deco, en 14-. "No es correcto dudar de sus lesiones. Ronnie tiene molestias y sigue un plan", mantuvo Rijkaard antes de viajar a Sevilla. Y añadió: "No tiene sentido hablar de si he reservado a Deco porque está lesionado". El plantel también se ha posicionado. Pero de forma más ambigua.

Del mismo modo que Xavi no certificó ni rechazó que Rijkaard les interpelara en Sevilla, sí que descartó que los jugadores hayan puesto en duda las lesiones de Deco y Ronaldinho, aquejados de una sobrecarga muscular y una tendinitis rotuliana, respectivamente, imposibles de detectar y evaluar por los médicos del club. A Ronaldinho se le hizo ayer una resonancia magnética de control y determinó que tiene el tendón inflamado. "No es lógico que se dude de su profesionalidad. Hay un parte médico y sabemos que tienen esas molestias", sostuvo Xavi. Así opinó Puyol: "Pongo la mano en el fuego por ellos". Xavi recogió el testigo: "Es un tema muy serio como para hacer broma. No se puede vacilar sobre esto y no lo vamos a permitir porque es una falta de respeto".

La titularidad de Ronaldinho y Deco ya se puso en entredicho antes del clásico, disputado el pasado 23 de diciembre. Pero aquel día Rijkaard volvió a apostar por ellos en el once inicial. El resultado no fue bueno. No estuvieron a la altura y el Barça perdió por 0-1 ante el Madrid. Desde entonces, desde que empezó el año, Ronaldinho trabaja al margen del equipo. Se somete a dobles sesiones -gimnasio y camillas por la mañana; trabajo de campo por la tarde-, como ya hizo muchas veces el curso anterior, pero no se entrena con los compañeros. Tampoco lo hizo ayer Deco y es, prácticamente seguro, que ninguno de los dos esté mañana ante el Murcia.

A la situación de Deco y Ronaldinho se añadió otro punto ácido. La plantilla azulgrana se sintió ofendida tras el duelo ante el Sevilla porque el técnico señaló exclusivamente a tres futbolistas. "Estuvieron menos fuertes de lo normal", dijo Rijkaard. Xavi respondió: "No tuvimos la frescura de otros días y, sin el balón, bajamos el nivel. Yo el primero. Pero no sé a quién se refería".

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