Bojan se luce en San Mamés

En una noche de reivindicaciones nacionalistas y deportiva a partes iguales, Euskal Herria y Catalunya repitieron el empate de 2006 en el Camp Nou. Ambas selecciones se repartieron las ocasiones y el dominio en un lance en el que sobresalió Bojan. Al joven barcelonista no le importa el rival o el partido que tenga por delante. Su gol fue lo más interesante de una primera parte raquítica de fútbol.

Catalunya tomó el pulso al encuentro antes que Euskal Herria. Xavi adoptó el timón y buscó de manera continua la conexión con Bojan. Ahí contó con la ayuda del siempre inquieto Corominas. Aunque no se prodigaron en exceso, su frecuencia fue la necesaria para desestabilizar a la defensa vasca, nerviosa e imprecisa. Un pase del espanyolista lo recogió entre los centrales Bojan y, tras zarandear a Lafuente con un golpe de cintura, anotó el primer tanto.

La segunda parte trajo más futbol. Los cambios le vinieron bien al equipo de Iribar mientras que desdibujaron al de Gratacós. Aduriz rondó en varias ocasiones el gol hasta que lo convirtió después de un rápido contragolpe.

El encuentro permitió observar otra vez a Mendieta sobre un campo. Sin minutos en el Middlesbrough, apenas entró en juego, aunque cuando lo hizo fue con sentido.

Catalunya volvió a intentarlo, pero sin Xavi ni Bojan ya no fue lo mismo. Bajo su portería actuó durante casi todo el encuentro Morales después de que Jorquera se lesionara de gravedad una rodilla (rotura del ligamento cruzado anterior, lo que podría suponerle seis meses de baja) en una acción fortuita. También se retiró lesionado Etxeberria.

Durante el encuentro, dominado por un fuerte ambiente nacionalista, los aficionados corearon gritos a favor de la independencia de Euskadi y Cataluña y se quemaron varias banderas españolas además de aparecer bengalas en ambos fondos.