Bebo y Chucho Valdés llenan el teatro Jofre de Ferrol

Que el talento no se hereda es difícil de creer escuchando a padre e hijo interpretar La comparsa mano a mano sobre el piano. Bebo y Chucho Valdés, la leyenda del maestro cubano y el genio musical de su alumno, conquistaron ayer al público ferrolano en el único concierto que ambos ofrecerán en Galicia dentro la gira conjunta que iniciaron el verano pasado que los ha llevado juntos de escenario en escenario.

Ayer aterrizaron en el remodelado teatro Jofre de Ferrol con el lleno garantizado desde hace semanas -las localidades se agotaron en pocas horas- y dispuestos a recompensar "la entrega" de un público ávido de escuchar las Lágrimas negras que encumbraron a Bebo Valdés cuando había sobrepasado los 80 años. Presumen de raíces gallegas, explica Chucho, de un bisabuelo -Ramón Amaro- "100% gallego" que llegó a Cuba desde alguna aldea gallega, que no sabe precisar. "Mi padre sabe", dice, "y a todos nos quedó el gusto por la cocina. Ese caldo gallego". No escatima elogios para hablar de su "maestro" y del "orgullo" de compartir escenario con el hombre que le "enseñó la música, al que veía de niño en el Tropicana". "Siento la emoción de entonces", asegura Chucho, "nos estimulamos mutuamente, juntos recreamos las cosas que me enseñó de niño. No nos alcanzaría la vida para tantas cosas nuevas y ritmos por hacer".