Nueva York corre el maratón sin iPod

El nacimiento del iPod y de otros reproductores digitales de música han sido una bendición para muchos amantes del jogging, que a su afán por mantenerse en forma han podido unir el brío y la energía que les puede dar a sus carreras el ritmo de los White Stripes o un solo de batería de Jimmy Page. Pero combinar ejercicio y música ya no es posible cuando se trata de competir en un maratón o cualquier carrera en Estados Unidos. Mañana, los cerca de 38.000 participantes inscritos en el maratón de Nueva York, uno de los más célebres del mundo, tendrán que dejar la música en casa y enfrentarse solos con los 42,1 kilómetros de recorrido.

O al menos eso querría el USA Track & Field, la entidad gubernamental estadounidense que se encarga de regular este tipo de carreras y que prohibió hace casi un año el uso de estos aparatos por cuestiones de seguridad. "Hasta entonces era una recomendación, pero en enero de 2007 se convirtió en una norma. Nuestra prioridad es garantizar la seguridad de los corredores, y si van escuchando música pueden perderse información vital, como avisos sobre los puntos de reparto de agua o cambios imprevistos en los recorridos", explicó a este diario Jill Geer, portavoz del USA Track & Field. "Pero el hacer cumplir esta norma depende de cada organización", añadió Geer, quien apuntó que los responsables del maratón de Nueva York no piensan descalificar a quien incumpla la orden.

Mary Wittenberg, directora de esta prueba, lo confirmó en el diario The New York Times, y afirmó que sería imposible controlar que 38.000 personas no usaran su iPod ya que no habría policía suficiente para ello. "Pero yo creo que si la gente lo utiliza es porque está loca. De lo que se trata es de concentrar cada uno de tus sentidos en la experiencia de correr el maratón de tu vida", dijo. Sólo si todas las competiciones se ponen de acuerdo en prohibirlo de verdad, Nueva York se unirá a ellas, añadió Wittenberg.

La ciudad también está contemplando prohibir el uso de los reproductores mp3 y el teléfono móvil en los cruces para evitar accidentes. De momento, la propuesta, sólo ha despertado indignación.