A la espera de resultados

Los mercados de valores se encuentran en pleno proceso de rebote tras los descuentos desde la zona de máximos, pero los analistas desconfían de las posibilidades de este intento ante la fragilidad creciente de la coyuntura económica.

Esta sesión destacó por la ausencia de indicadores económicos en los que apoyar decisiones, lo que llevó a una de esas raras sesiones en las que parece prevalecer el libre albedrío que, en este caso, se decantó por el mantenimiento de posiciones en la mayoría de los casos.

El Ibex 35 terminó el día con un avance del 0,66% que le mantiene por encima de los 15.400 puntos y que, técnicamente, le deja en situación de dirigirse otra vez hacia los máximos. El Ibex de las empresas medianas subió el 0,59%, y el de las pequeñas, el 1,55%.

El conjunto de los mercados europeos se movió en esa dirección, lo que parecía justificar la decisión de aguantar, pero la mayoría de los comentarios de los analistas destila desconfianza a corto plazo.

Más que al mercado español o a cada uno de sus valores, los profesionales del mercado miran hacia Estados Unidos y a la esperada debilidad de los resultados empresariales, como correspondería a una economía que sufre una crisis en el sector financiero. Teniendo en cuenta esa posibilidad, los análisis apuntan hacia una corrección, a pesar de que técnicamente el mercado español está más cerca de la subida que del recorte.

La publicación de los resultados de los dos grandes bancos españoles, hoy BBVA y mañana Santander, puede variar ligeramente esa percepción de riesgo y favorecer la alternativa de un rebote más fuerte.

La contratación en el mercado continuo descendió hasta los 7.201,51 millones de euros por la menor actividad institucional, mientras que las operaciones del "mercado abierto" superaron los 4.800 millones de euros, aunque entre lo negociado por Telefónica y los dos grandes bancos sumaban más de la mitad de esa cifra.