PSdeG y BNG buscan conciliar diferencias sobre el plan de Vigo

El alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, y el teniente de alcalde, el nacionalista Santiago Domínguez, intentarán conciliar hoy sus diferencias en relación con el plan general de urbanismo y, más concretamente, sobre la viabilidad de aplicar en el mismo una reserva del 40% del suelo edificable para vivienda protegida.

Mientras que Caballero considera "irrenunciable" aplicar la citada reserva de suelo en todos y cada uno de los ámbitos del plan general, Domínguez, en sintonía con la redactora del plan, Consultora Galega, considera "imposible" introducir ese ajuste y cumplir la prioridad de aprobar el plan antes de que acabe el año.

Los gestores del urbanismo vigués, socialistas, creen que los ajustes puede hacerse en un plazo de 45 días y desoyen las protestas por el efecto económico que pueda derivarse para los promotores en el desarrollo del plan. Aducen que el alza en el precio medio del metro cuadrado construido que sirve de indicador para los resultados ha pasado de 1.500 a 2.818 euros, con un incremento de casi el 80% [no del 180% como por error publicó este periódico el sábado], que puede servir de "colchón" para compensar el aumento de suelo para vivienda protegida, que en la actual redacción es del 22% en el cómputo general.