Por la puerta de atrás
La salida ayer de Paulino Plata del salón de Plenos recordaba al marido que va a comprar un paquete de tabaco. Parecía que iba a llamar por teléfono o al servicio, pero bajó de las escaleras y salió del Ayuntamiento de Marbella con ánimo decidido. La forma en la que el portavoz del PSOE abandonó el salón de plenos molestó mucho a la alcaldesa, que minutos antes de terminar el pleno se quejó de que ni siquiera se hubiese quedado al turno de ruegos y preguntas. "Tenía que haber tenido la delicadeza de esperarse a que finalizase el pleno, por consideración con los ciudadanos de Marbella y con los miembros de la Corporación", mantuvo. "Era el momento oportuno para tomar la palabra y despedirse de una ciudad a la que ha venido representando unos intereses de partido. Debería de haber explicado aquí cuáles son sus motivos", añadió. Muñoz vio una falta de cortesía en la actuación del todavía portavoz socialista y añadió que no había podido aguantar ni un minuto más de la cuenta. En un tono diametralmente opuesto se manifestó el abogado y presidente de la gestora de Marbella, que alabó su experiencia política y su alta capacitación. Su compañero de partido y viceportavoz del PSOE, Francisco Zori, justificó su comportamiento diciendo que tenía una cita y que todos sabían que iba a marcharse después de los asuntos urgentes para llegar a tiempo. Según Zori, el anuncio de Chaves pilló a la agrupación socialista "de improviso" e incluso Plata se sorprendió cuando leyó un SMS con la noticia. De hecho, según fuentes de la agrupación, se vio forzado a improvisar unas declaraciones, por las que se retrasó de su compromiso. El presidente de la Comisión Gestora, Diego Martín Reyes, sólo tuvo buenas palabras al conocer la pronta marcha de Plata. "Era una noticia que ya se sabía y estaba pendiente de ocurrir. Estoy convencido de que en cualquier lugar va a desempeñar una buena labor", aseveró.
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