La deuda de Llanera duplica los datos difundidos por el consejero delegado

Fernando Gallego, consejero delegado de Llanera, afirmó el pasado mes de marzo en una presentación pública de los resultados de la inmobiliaria en 2006 que las deudas que arrastraba la empresa rondaban los 300 millones de euros. Las cuentas de Llanera en 2006, a la que ha tenido acceso el diario Cinco Días, reflejan, sin embargo, unas obligaciones que suman 748 millones de euros. Al cierre de 2006, Llanera debía 301 millones de euros a entidades financieras, pero acumulaba deudas a largo plazo que sumaban 394 millones y deudas a corto que ascendían a 352 millones.

Fernando Gallego recordó el pasado mes de marzo que Llanera es una empresa familiar que no cotiza en bolsa y que, por lo tanto, no está obligada a detallar sus cuentas en público. Sin embargo, aseguró que las deudas de la inmobiliaria eran de 300 millones de euros. El consejero delegado se limitó a sumar las obligaciones a largo plazo adquiridas con entidades de crédito, esencialmente Bancaja, Banco de Valencia y Caja Mediterráneo, que sumaban 301 millones de euros a finales de 2006, según la auditoría de las cuentas de la sociedad presentada el pasado mes de abril.

Pero a esa cifra hay que sumar otras deudas a corto plazo con entidades de crédito, con empresas asociadas y otras deudas no comerciales por valor de 356 millones de euros. Además, Llanera acumulaba 22,5 millones de euros en deudas con la Administración y obligaciones con acreedores por operaciones de tráfico que ascendían a 58,5 millones de euros.

Entre los acreedores, el balance recoge un apunte "especial" cifrado en 152 millones de euros. Cantidad equivalente a un crédito concedido por el banco estadounidense de inversiones Lehman Brothers cuyos pagos renegocia la inmobiliaria, según confirmó el propio Fernando Gallego a Reuters el pasado lunes.

Los fondos propios de Llanera a final de 2006 eran de 70 millones de euros. Un portavoz de la compañía subrayó a Cinco Días que el activo circulante de la sociedad ascendía a 645 millones de euros.

El mismo informe revela que los ingresos por venta de promociones inmobiliarias ascendieron a 6,1 millones de euros, una cantidad mínima en relación con los volúmenes que refleja el resto del balance de la sociedad.

A pesar de la escasez de los ingresos derivados de la venta de inmuebles, pieza clave del negocio de cualquier inmobiliaria, las cuentas de 2006 recogen un alza de los gastos de personal en torno al 140% al cierre de 2006 hasta superar los 30 millones de euros. La plantilla de la inmobiliaria pasó de 400 a 736 empleados entre 2005 y 2006. La contratación se extendió a todos los escalones. Llanera empleaba a finales de 2006 a 40 directivos, según las cuentas.

La inmobiliaria Fadesa, que emplea a 1.256 trabajadores y paga una nómina conjunta de 64 millones de euros, tiene 39 directivos, uno menos que Llanera.

Testa, la inmobiliaria de la constructora Sacyr, declaró unos gastos de personal en 2006 de 6,6 millones de euros, la quinta parte que Llanera.