"Zidane era el 54% del presupuesto; los ocho fichajes de este año, el 30%", dice Calderón

Al presidente del Real Madrid, de naturaleza optimista, le gusta sentirse ganador. Siempre le ha gustado. Incluso la temporada pasada, cuando el equipo fue víctima de una catarsis en el juego y él miraba desconcertado a Fabio Capello desde el palco. Aunque el equipo no apasionara, él era el mejor porque, se justificaba, la decisión de traer al italiano no fue suya. Y, ahora que el Madrid de Bernd Schuster ha enfilado tres victorias seguidas, Calderón saca pecho. Lo hizo ayer en la asamblea de los socios compromisarios del club, convocada para aprobar -objetivo conseguido- el presupuesto para 2007-08, el nombramiento de dos nuevos locales y la liquidación del presupuesto 2006-07.

El presidente blanco intentó llevar su discurso por la nostalgia, por el camino lleno de obstáculos que tuvo que superar la temporada pasada -"nadie creía en nosotros y muy pocos nos concedieron una oportunidad"-, por el escaso apoyo de los medios..., para luego recuperarse de repente, subir el tono y reivindicar la importancia que tuvo en el cambio de entrenador y, a su modo de ver, del modelo deportivo. Aseguró que el despido de Capello no fue ninguna decisión "frívola ni caprichosa".

"Somos el primer club del mundo por ingresos, con 351 millones de euros anuales, el 15% más que el Manchester y el 21% más que el Barça", destacó el presidente madridista. Pero, cuando le recordaron que el Madrid es el que más se ha gastado en fichajes -230 millones en un año, cifra que ni Florentino Pérez con sus galácticos había alcanzado- se defendió recurriendo a un matiz. "No hemos gastado; hemos invertido y, además, con criterio", espetó.

"Tenemos recursos económicos para hacerlo", continuó. Y, acto seguido, sacó datos y cifras de la época de Florentino. "Zidane representaba el 54% del presupuesto total mientras que los ocho fichajes que hemos hecho sólo el 30%", explicó con hojas en la mano. Pese a ello, algunos socios le recriminaron la "pésima política" con las bajas. Muchos de ellos se quejaron, utilizando los ejemplos de Woodgate y Cassano, de que el club compra caro y no es capaz de vender caro.

"La mejor plantilla"

"Eliminamos la cultura de los galácticos sin renunciar a traer buenos jugadores. El Madrid ahora es un equipo y no un conglomerado de nombres. Tenemos la mejor plantilla de Europa", afirmó el presidente, quien habló de una "auténtica revolución" en el modelo deportivo del club: "El vestuario ahora está verdaderamente unido y la plantilla ha vivido un rejuvenecimiento".

Eso, según el propio Calderón, es el fruto de la llegada de Schuster en el banquillo. "La destitución de Capello no fue ni frívola ni caprichosa. Puede que arriesgada. Pero hay etapas en la vida que requieren tratamientos distintos y, superada la urgencia, hay que buscar algo más", concluyó.