Garzón estrecha el cerco sobre los afines a ETA con el arresto de Olano

La firmeza y la tolerancia cero ante ETA y su entorno mostradas estas semanas por el Gobierno y las fuerzas de seguridad se concretaron también en el terreno judicial. El juez Baltasar Garzón ordenó ayer la detención de Juan María Olano, el histórico dirigente de Gestoras pro Amnistía y de Askatasuna. El magistrado decidirá hoy si decreta su prisión preventiva, toda vez que el fiscal considera que Olano habría incurrido en una reiteración del delito de pertenencia a banda armada, del que ya se encuentra pendiente de juicio y en libertad provisional con fianza, y también por haber vulnerado la suspensión de actividades decretada.

Askatasuna, una de las organizaciones del entorno de ETA que más agitación callejera promueve en Euskadi, forzó el domingo la celebración de una manifestación que había sido prohibida por las autoridades vascas, lo que desencadenó un enfrentamiento con la Ertzaintza que se saldó con nueve personas detenidas, entre ellas el propio Olano.

La banda terrorista ETA, a cuyos presos defiende Olano y la organización que dirige, intentó en la noche del pasado domingo un atentado mayor en Logroño con un coche bomba cargado de 61 kilos de amonal. Un fallo en el montaje del artefacto evitó el atentado frente a la Delegación de Defensa en la capital riojana, del que la banda avisó con 20 minutos de antelación.