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30 personas frenan la agresión de un policía local a un 'mantero'

Juana Viúdez

Cerca de 30 personas impidieron ayer a mediodía que un policía local de Marbella terminara de ensañarse con un vendedor de productos falsificados al que minutos antes había tratado de detener en la calle de Francisco Norte, en pleno centro de la ciudad. Los vecinos se echaron encima de uno de los policías, recriminándole que le hubiera empotrado contra un coche y golpeado en la cabeza cuando ya lo tenía esposado. El policía local implicado amenazó con detener a dos de las mujeres que le increpaban y les pidió que se identificaran, aunque al final, mediaron otros agentes de mayor rango y sólo fue a dependencias municipales el inmigrante. Apenas una hora antes, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, felicitaba a la alcaldesa por haber disminuido la venta ambulante ilegal.

La detención del mantero se produjo sobre las 14.30, una hora en la que numerosas personas almorzaban en las terrazas de los bares o paseaban por la calle. "Estábamos comiendo y hemos visto a un inmigrante corriendo y a un policía detrás. Después lo ha empotrado contra el coche y le ha cogido por el cuello de mala forma. Entonces nos hemos levantado porque este verano ya hemos tenido una situación similar en la playa y no podíamos permitirlo", explicaba una testigo. Otra de las clientes que almorzaban en el mismo lugar apuntaba que las placas de los agentes implicados, que patrullaban en moto, eran la 523 y 531.

"Lo ha machacado como si fuera un perro", añadía un paseante. "Qué vergüenza, el chico no ha opuesto resistencia alguna", contemplaba una mujer que había salido de una peluquería, con el cepillo todavía enganchado en el pelo, al ver la situación. Todos coincidían en que el agente, bastante corpulento y parapetado tras unas gafas de sol oscuras, había hecho un uso más que excesivo de la fuerza. Algunos le llamaron "chulo" y "camorrista".

Tras el revuelo, llegó otra patrulla de Policía Local y el policía recriminado condujo al inmigrante hasta el coche. Un redactor de este periódico vio cómo antes de meterlo en la parte trasera del vehículo, el policía dio un manotazo en la cara al inmigrante esposado.

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Sobre la firma

Juana Viúdez
Es redactora de la sección de España, donde realiza labores de redacción y edición. Ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria profesional en EL PAÍS. Antes trabajó en el diario Málaga Hoy y en Cadena Ser. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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