Dos mil personas dan el último adiós a Lluís Maria Xirinacs
Más de 2.000 personas acompañaron ayer el cuerpo del ex senador Lluís Maria Xirinacs en su último adiós en el funeral celebrado en la basílica de Santa Maria del Mar. Tanto la homilía como los diferentes parlamentos pronunciados a lo largo de la ceremonia incidieron en la figura de Xirinacs como creyente y como patriota.
El vicepresidente del Gobierno catalán, Josep Lluís Carod, asistió al funeral acompañado del histórico luchador Jordi Carbonell, presidente de honor de ERC, así como de los también republicanos Jordi Portabella y Joan Tardà; los convergentes Felip Puig, Oriol Pujol y Quico Homs ocuparon los primeros bancos. La parlamentaria ecosocialista Dolors Camats permaneció fuera de la basílica durante toda la ceremonia. Bajo la lluvia, entre banderas independentistas y con el canto de Els segadors tuvo lugar un emotivo acto en el Fossar de les Moreres, donde la Fundación Randa, a la cual pertenecía el ex senador, leyó Acte de sobirania, texto que dejó escrito en su despacho antes de fallecer.
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