La pena infinita de Bojan

Soñaba con vivir la gira por Asia con el Barcelona y debutar vestido de azulgrana en el Camp Nou contra el Inter, en el Trofeo Joan Gamper. No podrá. Bojan Krkic (Linyola, 1991) está en Las Rozas, recuperándose de un problema en la rodilla y concentrado con la selección que participará en el Mundial Sub-17 en Corea del Sur. Si las cosas van bien y España juega la final, Krkic no volverá a Barcelona hasta el 11 de septiembre. "Habrá jugado más con la selección que con el Barça", se lamentan en el Barcelona. A los 16 años, la desilusión del chaval es tan grande como comprensible, y más para su padre, que fue futbolista. Por ello viajó el jueves hasta Madrid junto a su esposa, para hacerle entender que dada su privilegiada situación -Rijkaard le ha confirmado como jugador del primer equipo- no es momento de bajar los brazos. Pero el jugador, al fin y al cabo un niño todavía, no atiende a razones y es difícil levantar su moral, convencido como está de que él siempre ha cumplido con la Federación. "Estaba triste. Ilusionado por verse en el primer equipo del Barcelona, fue un palo para él perderse la gira", reconoció María Lluisa, la madre del jugador. "Fuimos a verle para transmitirle pensamientos positivos. Como ya no se puede hacer nada, lo mejor es jugar y disfrutar", apuntó. El chaval, según su madre, lo entendió perfectamente. La pasada temporada, Bojan Krkic, un goleador nato, llevó a la sub 17 a la victoria en el Campeonato de Europa, en Bélgica y además jugó en la sub 19, la sub 20 y la sub 21, en Tbilisi, contra Georgia (0-1), por imperativo legal. "No nos volverá a suceder que por unos meses se nos escape una figura", razonó Luis Aragonés, el seleccionador español, en referencia a lo sucedido con Dani Alves, lateral del Sevilla, que fue convocado por Brasil días antes de que recibiera la nacionalidad española y pudiera debutar con la roja. Conscientes de la proyección del jugador del Barcelona, la Federación Serbia trató de conseguir que Krkic debutara con su selección sub 21 para asegurarse su nacionalidad deportiva, pero el jugador -asesorado por el club y nacido y criado en un pequeño pueblo de la provincia de Lleida- apostó por España antes que por la tierra de sus padres. Así, el 5 de junio debutó a las órdenes de Iñaki Sáez contra Georgia. Ahora tiene la sensación de que la federación no le ha devuelto el gesto. El Barcelona negoció con la RFEF para que liberara a Krkic hasta el 9 de agosto, fecha en la que termina la gira por Asia con un amistoso en Hong Kong. Tres días más tarde se inicia el Mundial Sub 17 en Corea y la oferta del club catalán era que el jugador se incorporara directamente a la selección en Ulsan, ciudad donde España llegará el 13 de agosto y donde debuta contra Honduras en el primer partido del grupo, que completan las selecciones de Argentina y Siria. Según fuentes del Barcelona, la federación se negó a pagar la estancia del delantero durante esos días en Corea y tampoco aceptó que el jugador se recuperara de una tendinitis bajo el control club.

El jugador se recupera en Las Rozas de una lesión gracias a una máquina prestada por su club

Ante la negativa de la RFEF el Barça ha mostrado resignación -"no podemos hacer nada", se lamentó Laporta- y sorpresa -"no hace ni dos meses el chaval eligió España y así le pagan"-, dicen en los despachos de Can Barça-. Pero además ha ofrecido su colaboración: ha llevado a Las Rozas un aparato para ejercicios excéntricos clínico, del que carecen los servicios médicos federativos, imprescindible en el tratamiento de recuperación del desgaste en el tendón rotuliano que realizaba el delantero en el Barcelona.