"Todos los temas centrales de la ciudad están parados"

Abel Caballero (Ponteareas, 1947) entra puntualmente en su despacho a las ocho de la mañana y vuelve a casa a las 11 de la noche. Dice no sentirlo como sacrificio, sino como disfrute. No anhela vacaciones. Cada sábado casa a tres parejas. "A la gente le gusta que la case el alcalde y a mí, ejercer la representación de la ciudad. No le gusta al PP, que no encuentra espacio y se pone nervioso. No va a tenerlo, porque yo no me voy a cansar".

Pregunta. ¿Es inevitable, en esta primera fase de gobierno, cargar las tintas en lo mal que lo hicieron quienes le precedieron?

Respuesta. Culpabilizando a otros no se gana nada. Pero nos encontramos todo el presupuesto consumido y hay que decirlo. O que la alcaldía se gastó un millón de euros en publicidad y nos dejaron 70.000, o que el presupuesto de Vitrasa también está gastado, o que recibimos el proyecto de auditorio en las piedras. No me entusiasma decirlo, pero son datos y números, no inventamos.

"Culpabilizando a otros no se gana nada, pero nos hemos encontrado una situación realmente pesarosa"

"No extraño un mayor apoyo del Bloque; lo importante es que el gobierno empieza a funcionar bien"

"Mi primer objetivo sigue siendo dar a la ciudad el espacio político que le corresponde y no tiene"

"El plan de urbanismo estará listo en el otoño, con modificaciones generales y en algunos ámbitos"

P. ¿Tan mal lo hizo el PP?

R. No hay avances en ninguno de los grandes proyectos, en ninguno. La adaptación de la estación para el AVE, por ejemplo, sigue en estado embrionario, aunque hubo negociaciones: resultaron muy gravosas para la ciudad y habrá que reconsiderarlas. Es lo que nos toca.

P. Lo dice con satisfacción...

R. Hombre, me hubiera gustado encontrar mayores desarrollos en todo lo que está pendiente. O por lo menos en algo. Pero no hay nada. Todos los temas centrales para la ciudad están embarrancados. Ésa es la realidad.

P. Pues el PP no calla, promete dar batalla.

R. Han empezado siendo profundamente desleales. Les dimos parte y reconocimiento como oposición en la estructura de gobierno: tienen los mismos asesores que cuando gobernaban, les cedimos nuestro espacio físico en el ayuntamiento, todos los asuntos del primer pleno, asuntos de trámite, estaban pactados con ellos y no los votaron, se abstuvieron. No han reconocido nada. No me gustó por lo que tiene de deslealtad política. De talante.

P. Las últimas adjudicaciones del PP, la ORA y los aparcamientos, ¿son problemáticas?

R. Por ahora no tengo opinión, lo estamos viendo. Me sorprendió la precipitación con que hicieron esas concesiones, siendo ya gobierno saliente. Hablamos de 100 millones de euros...

P. El PP olvida al Bloque en su hostigamiento. Lo dirige contra el PSOE y singularmente contra usted: ¿le mosquea?

R. Me parece natural. El PSOE es el grupo mayoritario de la coalición, es un referente en la ciudad y yo soy el alcalde. Es un ataque muy centralizado. En el PP no han asumido aún que perdieron el gobierno y no soportan que, con todo lo que dijeron contra mí en la campaña, por aquí ya hayan pasado el presidente del Gobierno, la vicepresidenta y seis ministros, por no hablar de las frecuentas visitas del presidente y autoridades de la Xunta. Nunca había pasado eso, y no es casualidad. Mi compromiso principal es dotar a la ciudad del peso político que no ha tenido y ya se empieza a ver algo. Es lo que el PP no soporta. Y en vez de apoyar, tratan de aguarlo con ataques puntuales. Es decir, prima sus intereses partidarios sobre los de la ciudad.

P. ¿Son cómodas sus relaciones con el BNG?, ¿siente su apoyo?

R. Estoy muy satisfecho del pacto y de cómo está funcionando. Estamos en buena sintonía, en el nombramiento de la gerente de Urbanismo tuvimos unanimidad, y ése es un buen acuerdo. Yo he querido que todos estuviéramos cómodos, que pudiéramos trabajar a gusto por la ciudad y las condiciones están creadas; los primeros pasos son también satisfactorios. No extraño un mayor apoyo, tampoco lo he precisado. El apoyo se expresa en los plenos, no en otra cosa. El gobierno ha empezado a funcionar muy bien y eso es lo que importa. Y vamos a votar todo conjuntamente durante todo el mandato.

P. Pero ya suscitaron un par de rifirrafes por invadir usted territorios de su soberanía...

R. Bah, naderías. Son roces inevitables en el principio de la andadura. Creo que está claro que el alcalde lo es de todos. Yo quiero que el BNG ocupe su espacio en el gobierno y hemos llegado a una forma razonable de aplicarlo. Es un gobierno con dos partidos, lo que obliga a pensar y a reconocer siempre a la otra parte. Lo importante es que todos se sientan cómodos trabajando. En la campaña y antes pudimos percibir que había una gran demanda en la ciudad para que llegáramos a un acuerdo. Los vecinos pedían que garantizáramos el pacto, y ahí está, con la mejor voluntad en el fair play de socios de gobierno.

P. ¿Recibieron lo que pedían?

R. Todo no, naturalmente. Para eso negociamos. También querían los servicios generales, vías y obras, limpieza... Fuimos generosos porque así nos lo pedía la ciudad, y no me cabe duda de que nuestra actitud redundará en beneficio de ella.

P. ¿La distribución de áreas tiene una traslación presupuestaria?

R. Nada tiene una traslación estricta, matemática. El referente principal es la relación 9-5. En la negociación, la dotación presupuestaria de unas y otras áreas fue un punto a tener en cuenta, pero por aproximación, por darnos más referentes. Luego, el alcalde tiene un enorme peso, de difícil valoración. La piedra angular del acuerdo la dan el objetivo de hacer lo mejor para la ciudad y el situar a las personas más capacitadas para conseguirlo. Trabajamos en función de las necesidades de la ciudad y, una vez vistas, si después va más para uno u otro, vale igual. Así hemos conseguido un gobierno muy sólido y muy cohesionado.

P. ¿Este mes de gobierno ha alterado en algo los objetivos que planteaba como candidato?

R. No. El reconocimiento del espacio político de la ciudad, no renunciar a ninguna de las grandes obras (sigo garantizando que el AVE estará aquí en 2012), propiciar las 6.000 viviendas protegidas en cuatro años, aplicar al plan general la orden de Política Territorial y algún cambio en algunos ámbitos siguen siendo objetivos totalmente vigentes.

P. ¿Dónde cambiará el plan general?

R. En la reserva del 40% de edificabilidad para vivienda protegida. Ése es un cambio seguro. Cambiaremos algo de la ficha de Liñeiriños y, probablemente, en Plaza de España. Permita que nos quedemos ahí: la concejal de Urbanismo lleva dos semanas y necesitamos tiempo.

P. ¿Cuándo estará listo?

R. El trabajo técnico, en otoño. Agosto es un mes inhábil.

P. ¿Con qué calendario trabaja la Carta Municipal y el Área Metropolitana?

R. La Carta Municipal quedará necesariamente para la próxima legislatura de las Cortes. El Área Metropolitana, con 28 municipios, podrá estar reconocida en la actual del Parlamento de Galicia.

P. ¿Naufragarán ahora sus proyectos en el puerto?

R. No naufragará ninguno de los que tienen que ver con la ciudad. El de Jean Nouvel es vital y ha suscitado mucho entusiasmo: se hará. También la parte urbana de los de Beiramar y Bouzas.Abel Caballero / Alcalde socialista de Vigo

Está radiante y no hace nada por disimularlo. Feliz por desempeñar un cargo que antepone a cualquiera otro de los que ha ejercido en su ya larga carrera política, incluido el de ministro de Felipe González. Nadie podrá decir que Vigo sea un ayuntamiento fácil. Juzga "muy pesarosa" la herencia del anterior gobierno del PP y, sin la menor veleidad nacionalista, ha de bandearse en la coalición con el BNG. Sólo son acicates para trabajar "encantado" a destajo.