Almacén de corazonadas
El pabellón de México apuesta por Rafael Lozano-Hemmer. Son seis instalaciones de gran formato, que le reconfirman como uno de los mayores talentos de la creación digital contemporánea. En Almacén de corazonadas 100 bombillas parpadean al compás del latido del corazón de los últimos 100 visitantes, captado con sensores de ritmo cardiaco.
A medida que se desplaza, el público activa los diferentes sistemas: puede convertirse en antena humana y sintonizar radiofrecuencias con su propio cuerpo; despertar figuras dormidas proyectadas en el suelo que cuando se aleja dejan de interactuar y vuelven a sus sueños, y volver loco un ojo que la programación obliga a seguir los movimientos de todos los que entran en la sala.
Función de ondas es una escultura cinética interactiva que homenajea a las sillas diseñadas por Charles y Ray Eames en 1948, que cuando detectan un visitante forman una ola que se propaga por la sala. La entrada de varias personas causa turbulencias e interferencias entre las olas, ya que la obra está programada según las leyes de las dinámicas de los fluidos.
L.-HEMMER: www.lozano-hemmer.com
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.