"Navarro cabecea mejor que Puyol"

España pudo lograr una goleada de escándalo, Villa pudo subir a los altares, pero nada de eso ocurrió. El equipo se atrancó más de lo previsto y al asturiano le faltó dadivosidad y temple. Quizá porque no se consiguió la renta de goles esperada, ésa que beneficiaría a España en caso de empate al final de la fase, Luis compareció serio ante los medios de comunicación para intentar explicar lo que parece inexplicable: cómo este equipo se destiñe en el momento más insospechado. "Lo más importante es ganar, por supuesto, pero el fútbol a veces es así. La pelota no ha querido entrar ni de penalti. Me hubiera gustado marcar más goles, pero no ha sido posible. Les he dicho a los jugadores que tuvieran calma, que no intentaran marcar el segundo antes que el primero. Y con esa idea hemos empezado. Pero luego no hemos finiquitado a un rival que ha sabido salir en alguna que otra ocasión".

España, con este triunfo, se coloca segunda del grupo. ¿Significa eso que por fin se ha reconducido la situación?, se le preguntó al técnico. "Todavía está complicado, porque en una fase de 12 partidos lo normal es que te lo juegues al final. Pero tenemos la ventaja de jugar en casa los dos últimos partidos, ante Suecia e Irlanda".

Desde los medios locales se le preguntó su opinión sobre los tímidos gritos de los aficionados españoles, en el tramo final, coreando el nombre de Raúl. "No me ha molestado en absoluto, porque la gente está en su derecho de pedir lo que quiera", explicó.

Quizá por azar, en la alineación inicial de España figuraba un jugador por cada uno de los equipos que se juegan la Liga el fin de semana. Uno del Madrid (Sergio Ramos), otro del Barça (Iniesta) y otro del Sevilla (Javi Navarro). Luis negó haberse sentido condicionado: "A veces creéis que sabéis demasiadas cosas. Nunca estoy presionado por nadie. Yo me siento en el sofá y digo: 'Ésta es la alineación'. Los medios podéis comentar lo que queráis, y me parece muy bien. Ocurre que los españoles somos los listos del mundo, más listos que la leche". En ese momento, el intérprete tradujo las palabras de Luis y definió a los españoles como "inteligentes". "No", le interrumpió Luis. "Inteligentes, no. Listos". Dudó aquél, pero Luis le ayudó de inmediato: "Se trata de picardía, de picaresca, no de inteligencia".

En ese instante, un periodista local se interesó sobre la ausencia de Puyol y Luis lo explicó así: "El equipo rival va bien por alto y Javi Navarro cabecea mejor que Puyol. Pero, claro, eso usted no lo sabe". Por cierto, en ninguno de los córners que sacó España subió Javi Navarro a rematar.

Autor de los dos goles de su equipo, Villa se marchó "algo cabreado" por fallar dos ocasiones claras en el último tramo: un mano a mano ante el portero de Liechtenstein y un penalti que estrelló contra la madera. "Ya es raro. Llevaba un montón de meses sin fallar un penalti y en poco tiempo he fallado dos, uno con el Valencia y otro con la selección", se lamentó el delantero asturiano. "Empezamos muy bien el partido y merecimos más goles. No es que nos hayamos relajado, es que no hemos estado demasiado acertados a la hora de tirar a puerta", comentó Luis García, que también falló lo suyo. "Estamos satisfechos, pero no del todo", redundó Xabi Alonso. "El planteamiento del entrenador ha funcionado bien porque ha habido más variantes en el juego", apuntó el centrocampista.

España, segunda del grupo y con cinco partidos todavía por jugar, visitará a Islandia el próximo ocho de septiembre y cuatro días después recibirá a Letonia. La UEFA, mientras, decide mañana sobre el Dinamarca-Suecia suspendido el pasado sábado por la agresión de un aficionado al árbitro.