La gira compartida por Coti, Dover y La Oreja de Van Gogh llega a la Plaza de Toros de Valencia
Coti, Dover y La Oreja de Van Gogh tienen musicalmente poco en común, aunque suelen compartir cobijo en las listas de éxitos y, tal vez, hasta buena parte de sus seguidores. Desde principios de mayo, además, giran juntos por las principales plazas del país presentando, bajo la etiqueta de LKXA 40 Principales, sus últimos trabajos. El del argentino Coti se llama Gatos y palomas, es el cuarto de su carrera y, aunque quiere mostrar su faceta más rockera, derrocha melodías de pegada instantánea. El cuarteto madrileño Dover ensaya sobre los escenarios esa reinvención que, por la vía de la electrónica y las pistas de baile, supuso Follow the city lights. Con las guitarras en un segundo plano y, para desgracia de sus fans más puristas, con Madonna arrebatándole el puesto a Kurt Cobain en su altarcillo particular, la banda de las hermanas Llanos incluso ha pasado por la batidora clásicos de su repertorio como Serenade o Devil came to me.
El concierto, que se celebrará mañana sábado en la Plaza de Toros de Valencia a partir de las 20.30, lo cerrará el pop acaramelado y chicloso de los donostiarras La Oreja de Van Gogh, que llevan despachadas más de 500.000 copias de su disco Guapa.
Aún más surtido y dispar es el cartel del Festival de Benejúzar que el sábado, desde las 20.00, reunirá sobre el mismo escenario a Deluxe, The Pinkertones, Eskorzo, Dorian y Triángulo de Amor Bizarro. Y eso sin citar la larga retahíla de grupos locales y pinchadiscos (los franceses Rinôçerôse son los más populares) que completan el programa. La cita es en el Campo Municipal de Fútbol de la localidad alicantina de Benejúzar.
Otras propuestas de interés en Valencia son las siguientes: hoy viernes, The Lyres y The Sick Rose en el Dub Club (22.30), Rafa Pons en El Loco (23.30) y Fernando Garcín en Matisse (22.30); y el sábado, Skaparapid en El Loco (23.30) y Rix en Pa'berse Matao de Sedaví (23.00). Además, el trío valenciano de pop electrónico Mut se presentará en vivo durante dos días seguidos: mañana con El Futuro Peatón y el domingo junto a Miss Yanna Yah Yah, en Carme Teatre a las 20.30. Suenan oscuros, adoran a Depeche Mode, The Divine Comedy y Brian Eno, y a finales de año entrarán a grabar su debú discográfico, Nada que celebrar.
Muy aconsejable es, también, el concierto de The Lyres, grupo bostoniano capitaneado por el incombustible cantante y teclista Jeff Conolly desde 1979. Adictos al rock de garaje de primera generación, con The Sonics a la cabeza, vivieron sus años de gloria durante el revival del rock psicodélico y garajero de mediados de los ochenta. The Sick Rose son hijos de aquella escena y, con permiso de Not Moving, se alzaron como los estandartes del género en Italia. Su disco más reciente es Blastin' out y fue producido por el australiano Dom Mariani (The Stems o The Someloves). Apuntar, por último, que el de los locales Skaparapid será su concierto de despedida tras casi 14 años de actividad. Los aficionados al ska y el rock protestón les echarán de menos.
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