Entre Shanghai y Nueva York

Las noticias procedentes de Asia pesaron ayer más en el ánimo de los inversores europeos que las llegadas de Estados Unidos. Al menos, así fue al comienzo de la jornada. Las autoridades chinas han decidido triplicar las tasas a las transacciones bursátiles en el gigante asiático, y eso afectó a las bolsas asiáticas, que retrocedieron posiciones de forma generalizada con el desplome de Shanghai a la cabeza (-7,22%).

Los índices españoles no fueron una excepción y, tras dos días de subidas, los inversores aprovecharon las circunstancias para recoger beneficios. El Ibex 35 perdió momentáneamente el nivel de los 15.050 puntos.

La apertura de las bolsas en Nueva York atenuó la caída y disipó los temores procedentes de China. También el precio del petróleo apoyó la mejoría de los mercados, el crudo del mar del Norte se situó en torno a los 67,5 dólares. A mediodía, el índice selectivo llegó a dejarse un 0,72%, pero al final cerró la jornada en 15.137,3 puntos, al perder un 0,34%.

El parqué se tiñó de rojo en casi todos los sectores. Sólo subieron los títulos de las eléctricas, liderados por Iberdrola (1,13%). En el lado de las pérdidas, la mayor parte de compañías que cotizan en el Ibex, encabezadas FCC (-2,67%). Las empresas constructoras no tuvieron ayer su mejor día en los mercados. Todas excepto Sacyr registraron caídas.

El resto de índices españoles también se recuperaron levemente antes del cierre, aunque ninguno ganó posiciones en el cómputo general de la jornada. El Nuevo Mercado perdió un 0,59% y el Índice General madrileño, un 0,33%.

En el resto de Europa el comportamiento fue similar a los españoles. Londres acabó la sesión prácticamente en tablas (-0,07%), cuando llegó a perder casi un punto. Estocolmo encabezó las pérdidas entre los índices del viejo continente al dejarse un -0,77%.