Otra cima para Chus Lago
La primera española en coronar el Everest se presenta de 'número dos' en las listas de Abel Caballero a la alcaldía de Vigo
Hace dos años la alpinista Chus Lago señaló emocionada en su agenda el 27 de mayo de 2007 con rotulador rojo. No tenía ni idea, nadie lo sabía, que Galicia acudiría a las urnas para elegir a sus alcaldes ese día. Tampoco se imaginaba que se presentaría de número dos en las listas del PSdeG a la alcaldía de Vigo, que encabeza Abel Caballero.
El 27 de mayo tenía previsto enrolarse en otra aventura distinta. Se trataba de la fecha apalabrada para iniciar una travesía por Groenlandia que duraría "30 o 40 días". Los planes para la primera mujer española que pisó la cumbre del mítico Everest sin apoyarse en un bastón de oxígeno artificial (cuarta en el mundo) han cambiado notablemente.
"Le dije que sí [a Abel Caballero] porque merece la pena trabajar por mi ciudad"
De Zapatero: "Me pareció muy valiente cuando retiró las tropas de Irak"
Hace unos meses, Abel Caballero la rondó para formar parte de su candidatura. "No se lo puse fácil. Estuve dos meses dándole vueltas", comenta mientras se machaca en el gimnasio Coliseum de Vigo. "Normalmente, hago dos horas por la mañana y otras dos por la tarde, pero he bajado a una sesión porque la expedición se ha retrasado. Ricardo López, Perruca (dos exploradores polares), y yo tenemos previsto emprender la travesía después de las elecciones, pero la haremos en la mitad de tiempo".
Abel Caballero, un político con un perfil más técnico que populista, vio en esta heroína de las cumbres el complemento perfecto para compensar sus deficiencias durante la campaña. La alpinista se niega a aceptar el papel de florero electoral: "Si al principio incluso le dije que no podría estar una parte de la campaña por el viaje a Groenlandia. Abel me dijo que le daba igual, que me quería para los cuatro años de gobierno. Supongo que creyó que si soy capaz de planificar una expedición, también podría hacerlo bien en su equipo".
Dos meses estuvo madurando la respuesta. De Caballero le convencía "que está enamorado de Vigo", como ella, y que "su proyecto es precioso y realizable". Pero fue José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente del Gobierno, el que inclinó definitivamente la balanza: "Me pareció muy valiente cuando retiró las tropas de Irak. Y me convenció con las medidas sociales en temas como el matrimonio homosexual, la igualdad, la violencia de género...".
A sus 42 años, casada y sin hijos, Chus Lago se considera una mujer de retos. Su cuadragésimo cumpleaños, el 25 de diciembre, decidió celebrarlo por todo lo alto en el monte Vinson, la pared más alta de la Antártida con casi 5.000 metros. "Fue una excelente manera de entrar en la cuarentena".
Hija de un trabajador del sector naval, a los 11 años empezó a subir los tímidos montes de los alrededores de Vigo con sus dos hermanos. Pero la afición se convirtió en pasión y luego en profesión. Nada más conquista una cima, se marca un nuevo reto. "Al hacer cumbre en el Everest me dio la impresión de que se había acabado todo. Y fue un proyecto de siete años. Pero enseguida me pongo nuevas metas". Hace cuatro años pidió la excedencia en el gimnasio, en el que es técnico superior de animación deportiva, para entregarse a la aventura. Su palmarés ocupa varios folios de papel y ha publicado dos libros narrando sus flirteos con la muerte.
Pero este Leopardo de las Nieves, distinción que concede la Federación Rusa a los que alcanzan sus cinco montañas más altas, no contaba con un pico llamado Abel Caballero. Una mañana, después de dos meses calibrando pros y contras y de varias reuniones con su mentor político, descorrió las cortinas sin haber podido pegar ojo. Despertó a su marido y le espetó: "Le voy a decir que sí". "¿Por qué?", le preguntó él. "Porque merece la pena trabajar por mi ciudad", respondió.
Excepto las cuatro ideas prestadas a Emilio Pérez Touriño para redactar el programa electoral que el PSdeG blandió durante las pasadas elecciones autonómicas, Chus Lago nunca había hollado las arenas movedizas de la política. También se esmera en este peculiar entrenamiento: "He presentado varios mítines por las parroquias y acompaño a Abel para conseguir discurso político".
Hay un problema que quizá no haya calculado Caballero. Chus Lago es una mujer indomable. Del 16 de noviembre al 16 de enero próximos intentará con la portuguesa Daniela Teixeira llegar al Polo Sur geográfico. ¿Y si su voto es imprescindible para aprobar el Plan Xeral de Ordenación Municipal? Interrumpe la sesión de abdominales para pensar la respuesta: "Llevo dos años preparando esta expedición, pero conociéndome, me tragaría todo el hielo y me quedaría".
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