La participación supera el 84%, la cota más alta de la V República

La participación ha alcanzado una de las cotas más altas de unas elecciones presidenciales en la V República francesa, sólo superada por la de la primera vuelta celebrada en los comicios de 1965, que llegó al 84,8%. Y explica con claridad tanto la caída de Jean-Marie Le Pen como el hecho de que, con más de siete millones de votos, François Bayrou se haya quedado fuera, mientras que el aún presidente, Jacques Chirac, pasó a la segunda vuelta hace cinco años con algo más de cinco millones de votos.

La participación fue ayer del 84,6%, según los últimos datos oficiales facilitados por el Ministerio del Interior. Un porcentaje muy elevado en comparación con el alcanzado en la primera vuelta de los comicios de 2002, que apenas fue del 73%. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que en aquellas últimas elecciones la abstención fue récord. En cambio, en las primeras vueltas de 1974, 1981 y 1988, la participación superó el 81%.

Las colas durante todo el día de ayer, soleado, fueron enormes en todos los colegios electorales del país. Los mismos votantes parecían sorprendidos por encontrarse con tanta gente. A las 12 del mediodía habían votado ya más del 30% de los franceses.

A las cinco de la tarde, el 73,8% de los electores ya habían depositado su voto en las urnas. Los datos señalan que a esa hora representaban un incremento de más del 15% sobre las de la primera ronda de las elecciones presidenciales celebradas en 2002, y superaban incluso la participación total en aquella edición, que fue del 73%.

En las elecciones de 2002, antes del mediodía no había votado más que el 21,4% y la participación era del 58,5% antes de la cinco de la tarde, según los datos oficiales.

El 70% de los colegios electorales franceses cerró a las seis de la tarde, mientras que los de las ciudades medianas, que suponen el 5% del total, permanecieron abiertos una hora más y los colegios más grandes no cerraron hasta las ocho.