Controlar los apoderados
La dirección regional del PP que lidera Francisco Camps ha optado nuevamente en la confección de las listas municipales por apurar los plazos y reducir el margen de maniobra de los zaplanistas. Para ello, Camps no ha dejado resquicios. Todos los apoderados del PP, que son los encargados de registrar oficialmente las candidaturas ante las juntas electorales, son personas de probada lealtad. Aunque ello haya supuesto en el apoderado, en ocasiones, no tenga ninguna vinculación con el partido judicial en el que se realiza todo el papeleo electoral.
El lunes estos apoderados registrarán las candidaturas de los 54 municipios de más de 20.000 habitantes -sobre cuya composición dictamina en última instancia la dirección regional- y de los centenares de Ayuntamientos con menos de 20.000 habitantes -cuya competencia es de los órganos provinciales, aunque pueden ser modificadas en instancia superior-.
Sin embargo, el comité electoral regional del PP no anunciará las listas aprobadas definitivamente hasta unas pocas horas antes. Así, si alguien tiene prisa o se pone nervioso por la falta de confirmación de su candidatura, tendrá poco tiempo para presentarse en una lista alternativa a la de su partido.
