"Nosotros no hemos fallado"

Si ayer leían el Hola, hoy se pueden llevar la caña de pescar. Los tripulantes de los 11 barcos cumplieron su tercer día de velas caídas. Los meteorólogos predicen dos días más de calma chicha. Algún optimista dice que quizás esta tarde se navegue.

Valencia ya ha entrado en la historia. Desde 1983, fecha de inicio de la Louis Vuitton, nunca se habían suspendido los tres primeros días de la competición, que consiste en varias regatas para elegir al contrincante del Alinghi, defensor de la Copa del América. Quizás por esa razón, ayer comparecieron los hombres del tiempo de los 11 equipos.

"A mí no me gusta nada esta fama; prefiero que se la lleven los navegantes", se defiende entre los cámaras Marta Weores, la mujer del tiempo del Shosholoza. "Estábamos tan ansiosos de comenzar la competición, que hemos pecado de optimistas. El corazón nos pedía regatear, aunque los datos nos decían que era muy improbable".

Después de tres días de frustración, el corazón y la cabeza de Weores caminan juntos: "Mañana

tampoco; el viernes, quizás".

El español Guillermo Altadill da la cara por el equipo alemán, Team Germany: "Estamos al revés de lo normal, una borrasca al norte de África y un anticiclón en Irlanda. Quizás mañana se pueda disputar una manga".

En la edición de Auckland 2000 se anuló el 32% de los días de regata; en 2003 en la misma ciudad, y pese a la experiencia, las cancelaciones fueron del 40%. La fase final estuvo suspendida ocho días seguidos. Chris Bedford, representante de Oracle, sonríe pícaramente: "¿Usted cree que nos ha pillado de sorpresa? Nosotros no hemos fallado.Todos tenemos los datos históricos de Valencia y ahí se ve que abril es un mes inestable. A partir del domingo todo irá bien".

Coincide con él Juan Carlos Oliva, español en el equipo italiano +39. "También es cierto que se está alargando más de lo habitual. La tierra está húmeda".

Típico del espíritu neozelandés, Tom Addis no pierde tiempo en polémicas. "Estamos preparados para las cancelaciones. La vela es un deporte que depende siempre del viento".

Del viento y de los jueces. Una suspensión puede ser tan arbitraria como un penalti del Madrid. A unos equipos, como el China Team, les favorece regatear con brisa suave; a los favoritos no les gusta nada de nada y por eso se levantan suspicacias.

"No hemos tenido duda alguna en los tres días de suspensiones", se defiende Javier Escolano, segundo oficial de regatas. "El primer día hubo momentos de 7,5 nudos, pero nada consistentes. Si hubieran sido las regatas previas nos hubiéramos podido arriesgar, pero ahora los equipos agradecen navegar con garantías. Con seis nudos mantenidos en todo el campo mañana ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~