Mil personas piden en Castellón parar el polígono de El Serrallo

Alrededor de un millar de personas se manifestaron ayer en el distrito marítimo de El Grao de Castellón para exigir la paralización de los proyectos de ampliación de las empresas eléctricas y petroquímicas ubicadas en el polígono energético de El Serrallo, así como por la futura instalación de tres cementeras en la dársena sur del puerto. "Por la salud" fue el lema escogido por los manifestantes que recorrieron las calles de El Grao y finalizaron la marcha en la tenencia de alcaldía, donde leyeron un manifiesto.

Pese a que, en un principio, las puertas de las dependencias municipales se cerraron, finalmente, los convocantes (Asamblea ciudadana del Grao de Castellón, Plataforma No a la Contaminación y AMPA del colegio La Marina, ente otros) pudieron entregar el escrito en el registro. En él, reclaman la paralización de los proyectos de ampliación de las empresas ya existentes en el polígono petroquímico y los previstos para la construcción de tres cementeras y una planta de biodiésel en el puerto. Además, los manifestantes exigen la instalación de estaciones de medición de partículas y de gases en el colegio que se encuentra más cercano a las industrias. Otra de las reclamaciones es la realización de un estudio epidemiológico elaborado por especialistas externos sobre oncología, enfermedades cardiovasculares y respiratorias.

"Queremos información", reclamaron frente a las dependencias que el Ayuntamiento de Castellón tiene en el distrito marítimo. Y exigieron que la información sobre los planes de emergencia exterior se expliquen en los colegios, en los centros de salud, "persona a persona, casa a casa para saber qué nos rodea y qué hemos de hacer en caso de cualquier accidente".

El "cumplimiento estricto de la ley" fue otra de las reclamaciones expresadas en el comunicado ya que, en algunos casos, las industrias se encuentran a una distancia del casco urbano menor a la permitida. "Lo tenemos claro -señalaron en su comunicado- es nuestro derecho legítimo a defender nuestra salud y el derecho a respirar el aire más puro posible".