_
_
_
_
Reportaje:Fútbol | Fase clasificatoria para la Eurocopa de 2008

Albelda y Alonso, agua y aceite

El seleccionador, que siempre ha preferido al mediocentro del Valencia, culpabiliza al jugador del Liverpool del mal juego

Diego Torres

Igual que pasa con los equipos sin alma, la selección española es una máquina de desfigurar futbolistas. El seleccionador, Luis Aragonés, se dedicó a señalar a los casos más notables. El miércoles apuntó a Torres. Ayer de madrugada, después de ganarle a Dinamarca, señaló a Xabi Alonso. De Torres dijo que su progreso se ha estancado. De Alonso, que perdió demasiados balones.

Torres y Alonso jugaron la segunda parte contra Dinamarca. Estuvieron en el campo cuando el rival, con sólo diez jugadores, se hizo con el control del partido. Esta situación los convirtió en un blanco fácil. Y el seleccionador, cuando se trata de buscar culpables, no se complica. "Es muy extraño ver a jugadores de la calidad de Alonso o de Iniesta perdiendo tantos balones", dijo, para explicar los problemas de España para cerrar el partido.

La elección de Luis es esencial, y de ella depende la identidad que quiere darle al equipo
Más información
La victoria del desencanto

En los corrillos del Bernabéu, Luis Aragonés también se quejó de la poca presencia de Albelda en los momentos más críticos del segundo tiempo. Pero a Albelda, que es su capitán, se cuidó mucho de denunciarlo en público como hizo con los demás. Luis Aragonés administra sus dosis de palos con sentido político.

Al enterarse de las palabras de su técnico, Alonso puso cara de póquer. Nacido en Tolosa en 1981, el actual organizador del Liverpool no se deja sorprender. "Es verdad", admitió; "hemos perdido el balón. No hemos podido llevar el control del partido y nos han cortado mucho el ritmo con faltas y balones largos. El gol les ha dado oxígeno y nos han acabado metiendo en nuestro campo".

Alonso sabe que desde la eliminación ante Francia, en el Mundial, su situación en el equipo es inestable. Si antes del Mundial Luis Aragonés dudó de su capacidad para conducir a la selección, después le ha mantenido en un segundo plano. De nada le sirvieron dos buenos partidos ante Ucrania y Túnez. El técnico nunca ha demostrado demasiada confianza en su fútbol, y finalmente se ha inclinado por situar a Albelda por delante de los centrales porque le gusta su actitud defensiva. "Albelda", explica Luis Aragonés; "me rehace la línea de cuatro cuando suben los laterales".

El entrenador quiere que Albelda ocupe el espacio vital de Alonso. No hay sitio para los dos. "Como mejor me siento es con todo el campo de cara", dice Alonso. El hombre es uno de esos medios centros que encajan mal en el doble pivote. Necesita expresarse con el pase desde el punto de partida de las jugadas porque se identifica con la gestión del juego. Si recibe a un costado, o demasiado adelantado, pierde el hilo. No ha nacido para ser lo que Fernando Redondo llamaba, con ironía, "rueda de auxilio".

La elección entre Alonso y Albelda tiene que ver con la identidad que se le quiere dar al equipo. Se trata de jugadores que imprimen carácter y tienen una convivencia difícil puesto que representan estilos antagónicos. A Luis Aragonés le cautiva más Albelda. Después de la derrota ante Irlanda del Norte, en Belfast, el seleccionador pareció encontrar una coartada perfecta para hacer lo que le pedía el cuerpo. Si durante el Mundial mantuvo a Alonso como único medio centro, escoltado por Senna y Xavi, en Belfast el técnico prefirió situar a Albelda en el medio y desplazar a Alonso a un costado. Las consecuencias fueron nefastas. En un intento de pasar un balón a Casillas, Alonso le sirvió a Healy el primer gol del partido.

A partir de Belfast, Alonso ha ido al banquillo. Contra Suecia, Albelda ocupó el medio centro en solitario. No funcionó. Ayer, pasó lo mismo. Preguntado por la falta de liderazgo en la plantilla, Luis Aragonés lo niega, y apela a tres hombres: "Albelda, Puyol, y Casillas". El triángulo no se toca. La confianza del técnico en sus capitanes se traslada a la alineación. Y en el centro del campo, si juega Albelda, Alonso se queda fuera. Cuando coincidieron, en la segunda parte contra Dinamarca, España no supo a qué jugaba. Como era de esperar en Luis Aragonés, puesto a buscar culpables no le costó nada encontrar a Alonso.

En el entrenamiento de ayer, en Las Rozas, el seleccionador dedicó 20 minutos a charlar con sus futbolistas sobre lo poco que le gustó el partido que jugaron el sábado. Hoy la expedición se traslada a Mallorca, donde se enfrentarán a Islandia el miércoles. Para ese partido, Luis Aragonés proyecta dar entrada a Ramos y a Puyol en sustitución de Ángel y Navarro. Por supuesto, Albelda no se toca.

Luis Aragonés charla con sus jugadores ayer antes del entrenamiento.
Luis Aragonés charla con sus jugadores ayer antes del entrenamiento.DIARIO AS
Albelda intenta controlar el balón ante el danés Agger.
Albelda intenta controlar el balón ante el danés Agger.REUTERS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_