El visado de viviendas batió el récord el año pasado, con 864.000

Un total de 864.000 viviendas obtuvieron en 2006 el primer certificado necesario para iniciar las obras. Un 18% más que en 2005. A tenor de estos datos, 2006 tampoco fue el año en el que aterrizó el sector del ladrillo. Eugenio Rodríguez Cepeda, decano del Colegio de Registradores, dice que lleva años oyendo hablar de un inminente pinchazo de la burbuja inmobiliaria que nunca acaba de llegar. Hasta ahora, ya que en algunas zonas, como Levante o Madrid, los registradores han detectado un descenso en la inscripción de viviendas. "Por el momento sólo lo hemos notado en nuestros avances de actividad, pero estamos seguros de que las próximas estadísticas confirmarán nuestra impresión", asegura.

Rodríguez Cepeda auguró ayer, durante la clausura del curso de economía organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica, la disminución en la demanda de primeras viviendas. Entre las razones, citó la caída en la natalidad de los años ochenta. "Los nacidos en el baby boom de los sesenta y setenta han sido los compradores", aclaró.

Respecto a la futura ley del suelo prevista para el mes de julio, Rodríguez Cepeda fue tajante: "Esperamos muy poco de ella", dijo. Alimenta su pesimismo el que las competencias recaigan en las comunidades autónomas y los ayuntamientos, por lo que la norma ministerial queda descafeinada. Además, cree que la nueva ley parte de una premisa equivocada. "Las tierras rústicas se valorarán por el rendimiento de sus cultivos. ¿Quién va a tolerar que tierras cercanas a las ciudades se expropien por un euro", preguntó.

Al hilo de la ley del suelo, el analista José Barta alertó durante el curso de un efecto pernicioso para las inmobiliarias cotizadas: la sobrevaloración de los terrenos que pasarán a ser rústicos. Barta dijo que muchas de estas empresas han contabilizado sus terrenos en función de expectativas y que, con la ley en la mano, su valor descenderá una media de un 20%. "A efectos de expropiación o sustitución, las tasadoras tendrán que rebajar la valoración de las inmobiliarias que cotizan en Bolsa", afirmó. Según sus cálculos, Inmocaral está sobrevalorado en un 30%; Metrovacesa, en un 17%...