Acció Ecologista se opone al indulto al ex alcalde de Pego

El ex alcalde de Pego Carlos Pascual no es un simple cultivador de arroz. Mostró "un desprecio absoluto" hacia "su deber de proteger el medio natural" del marjal de Pego-Oliva y hacia los mandatos judiciales que le obligaban a respetar el parque natural. Así lo expone Acció Ecologista-Agró en su escrito de rechazo a la petición de indulto de Pascual, condenado a seis años de cárcel por delito medioambiental y atentado.

La Audiencia de Alicante condenó a Pascual y el ex teniente de alcalde de Pego José Orihuel a seis y tres años de prisión, respectivamente, en una sentencia ratificada por el Tribunal Supremo en diciembre pasado. El fallo sostiene que ambos se opusieron a la existencia del parque protegido y actuaron para recuperar el cultivo del arroz y lograr así mejores precios para las fincas de particulares en el marjal, ya que la Generalitat compraba terrenos para completar el espacio natural. Los condenados aprobaron quemas de vegetación, obras para rebajar el nivel de agua de la zona húmeda, caminos y diques para facilitar el paso de vehículos. Sus decisiones degradaron 600 hectáreas, la mitad del terreno del parque natural, que sufrió daños ecológicos valorados en 1,2 millones de euros. Una indemnización a la que el Ayuntamiento gobernado ahora por el PP no sabe cómo hacer frente.

Pascual y Orihuel, además, ignoraron la orden de un juzgado de Dénia de detener las agresiones al marjal, y el ex alcalde retuvo al director del parque en una inspección e impidió su salida. Acció Ecologista-Agró recuerda estos hechos en el escrito a la Audiencia de Alicante para oponerse al indulto pedido por los condenados. Como acusación en el proceso judicial, el tribunal incluirá sus alegaciones en el expediente. La organización destaca que Pascual no ha sido condenado "por cultivar arroz", como defiende su abogado, sino por ser responsable de incendios, aterramientos, vertidos y mortandades de peces sufridos por el parque. Además, "eligió voluntariamente y con gran empecinamiento transformar" el marjal, arrasó vegetación y destruyó nidos de aves, no dudó en desobedecer órdenes judiciales, impidió a los bomberos apagar fuegos, y retuvo contra su voluntad al director del parque. Los ecologistas señalan que "Pascual no se ha rehabilitado, al contrario, sigue justificando su actuación" y ha demostrado su "desprecio" hacia la justicia. Conocía las leyes que le obligaban a proteger el parque y las ignoró.

El letrado del ex alcalde pregunta en su petición de indulto total o parcial si es necesario que Pascual cumpla una pena privativa de libertad. La respuesta de Acció Ecologista es que sí, ya que actuó "de manera consciente", abusó de su posición de alcalde y ha tenido un juicio con garantías. Para los ecologistas, que también se oponen al indulto de Orihuel, la sociedad debe percibir que un delito medioambiental no queda impune.