Escritores resaltan el valor de la poesía de Ricardo Molina en unas jornadas
Da igual el momento. Morir siempre es una faena. Aunque peor es que el fin llegue cuando se comienza a reconocer, a ensalzar, el trabajo hasta entonces ignorado. Eso es lo que le ocurrió al poeta Ricardo Molina, que falleció en Córdoba en 1968. Él fue uno de los creadores de Cántico, aquella revista que acabó convirtiéndose en una corriente literaria en la España de posguerra.
Molina y el resto de sus componentes (Juan Bernier, Julio Aumente y Pablo García Baena) apostaron por el valor y la belleza de la palabra alejada de la poesía social. La crítica no reconoció su literatura. Y Molina falleció centrado más en sus ensayos que en la poesía.
"Murió en el peor momento", recuerda García Baena, uno de los literatos y expertos que participan, hasta el 8 de marzo, en las Jornadas Literarias Homenaje a Ricardo Molina. Apenas un puñado de meses después de la desaparición del poeta cordobés, surgió un grupo de jóvenes literatos. Los novísimos hicieron de Cántico y de su forma de hacer literatura su bandera. Pero ya era tarde.
Molina era para García Baena, ante todo, "un amigo querido". "Cántico es una unión de amigos más que de poetas", sostiene. Pero también García Baena recuerda a su compañero como "un trabajador insaciable". "Los demás éramos más bien vagos, Ricardo era el que tenía la idea general de Cántico".
"Voz teórica"
Para Guillermo Carnero, profesor universitario y uno de los poetas del grupo de los novísimos, Molina fue "la voz teórica" de Cántico. Asegura que, de todas las notas que este poeta escribía en la revista, se extrae "el punto de vista estético" de esta corriente literaria.
Sin embargo, Carnero también alaba la faceta poética de Molina. En su opinión, si no hubiera muerto (hoy tendría 90 años) "sería junto con García Baena uno de los puntales de la literatura española".
Pero ahora sólo queda su obra. Escribió una docena de poemarios y varios ensayos. Al margen de sus versos, García Baena destaca sus aportaciones sobre el mundo del flamenco. Mundo y formas del cante flamenco es, para el poeta cordobés, "la biblia del cante".
Precisamente, las jornadas, organizadas por la Oficina de la Capitalidad Cultural Córdoba 2016, prestan especial atención a esta faceta de Molina. Sobre esa obra que Baena eleva a libro sagrado hablarán hoy Agustín Gómez y Félix Grande. Lo mismo hará mañana el escritor José Manuel Caballero Bonald, que cierra el encuentro con una conferencia de clausura titulada Ricardo Molina y el flamenco.
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