_
_
_
_
Crónica:Fútbol | 24ª jornada de Liga
Crónica
Texto informativo con interpretación

Tiembla el Celta

El equipo de Vigo se cierra tanto con sus dos goles que entrega el balón y el control al Racing

El golpe de timón del Celta para enderezar el rumbo perdido estos meses parecía definitivo con el buen juego desplegado en la Copa de la UEFA. Pero en la Liga, y en casa, el equipo de Fernando Vázquez se echa a temblar a las primeras de cambio. Hasta con dos goles de ventaja le da tanto pánico rematar la faena que se acaba bloqueando, como el paciente de vértigo que no puede contener el impulso de inclinarse hacia el abismo.

Así regalaron los vigueses un empate precioso al Racing, un equipo en racha que pudo haber cosechado la remontada del año si el peligroso y compensado dúo Munitis-Zigic hubiera tenido un poquito más de fortuna. Hay que decir, pese a cualquier resultado posible, que el hombre del partido fue el delantero cántabro, un atleta antes que futbolista en el mejor sentido de la expresión, una auténtica pesadilla para las bandas célticas. A quien ocupó la derecha, le mareó en el primer tiempo -Aspas tuvo que recibir numerosas ayudas- y al de la izquierda, con el internacional Ángel de lateral, le desbordó hasta el pitido final.

CELTA 2 - RACING 2

Celta: Pinto; Jonathan Aspas, Tamas, Contreras, Ángel; Oubiña, Iriney; Gustavo López (Núñez m 70), Bamogo (Lequi m. 62; Perera, m. 83), Nené; y Baiano. No utilizados: Esteban; Areias, Yago y Jorge.

Racing: Toño; Pinillos (Cristian Álvarez m 77), Rubén (Juanjo m 68), Garay, Oriol; Scaloni, Vitolo, Colsa, Serrano; Munitis y Zigic. No utilizados: Calatayud; Cristian Fernández, Tomás, Felipe Melo y Momo.

Goles: 1-0 m. 24. Penalti que transforma Baiano. 2-0 m. 32. Bamogo, de cabeza a pase de Gustavo López. 2-1 m 55 Munitis, de disparo raso. 2-2 Cristian Álvarez, de penalti.

Árbitro: Medina Cantalejo. Amonestó a Pinillos, Scaloni y Zigic.

Unos 12.000 espectadores en Balaídos

El Celta pensó que todo soplaba a su favor desde los primeros minutos, con un penalti más que dudoso a su favor que convirtió Baiano. El Celta mantuvo el optimismo en el juego y el control del balón. Vázquez, por iniciativa propia y por las ausencias médicas, probó un esquema novedoso sobre el campo, con el flamante fichaje Bamogo acompañando a Baiano en la punta. Se puso de manifiesto una de las máximas del conjunto vigués esta temporada: sobran filigranas y escasean la fuerza, la coordinación y la autoridad ante el rival.

La ausencia del estilista Canobbio, muy estético cuando tiene el balón en su poder, se notó en que Bamogo, su sustituto, corrió millas con y sin balón, y acosó a la defensa racinguista hasta la saciedad. A la postre, cerca de la media hora, el francés recibió un pase clavado de Gustavo López y dejó sentado a Toño, el portero rival.

No se acabaron aquí las sorpresas en ambas alineaciones. El cuadro de Vázquez salió en la segunda mitad dispuesto a amarrar el resultado sin pensar en otra cosa. Mientras, el Racing, con un Munitis que distribuye balones y ánimos a raudales, se planteaba intentar la remontada. En esa situación, el técnico gallego metió a un defensa, Lequi, y retiró a un delantero como Bamogo.

Y empezó el repliegue que, sin embargo, se tradujo en el primer gol de los de Portugal. Scaloni se despega de sus defensas y se va a la línea de fondo, desde donde da un pase cómodo a Munitis, que dispara y Pinto sólo puede rozar con el guante. En ese momento, el Celta ya jugaba con cinco defensas. A los 21 minutos de poner a Lequi en juego, y ya con el empate tras un segundo gol de penalti lanzado por Cristian Álvarez, Vázquez decide retirar al argentino y poner en su lugar a Perera, un delantero. El Celta ya había perdido toda su compostura. Retrocedió tanto que se metió en una caverna. El Racing jugó solo, sin rival en 70 metros, los últimos minutos.

Oubiña y Munitis pugnan por el balón.
Oubiña y Munitis pugnan por el balón.LALO R. VILLAR

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_