San Valentín y el conejo rampante
Un catálogo de ideas originales para celebrar el Día de los Enamorados
Vuelve San Valentín. Como el título de una película que allá por los primeros años sesenta -del pasado siglo XX-, nos descubría, recién salidos del gasógeno y las radionovelas de Sautier Casaseca, las bondades aliadas del consumo y los asuntos del corazón. Ahora San Valentín regresa con GPS para no perderse, móvil última generación para hablar con los operadores celestiales y reproductor MP3 para escuchar las canciones de Diana Krall, huérfanos melódicos como estamos desde que Augusto Algueró ha dejado de componer. Un San Valentín en rojo encendido como la lencería que visten las maniquíes de una conocida tienda de moda erótica del centro de Valencia. Dos chicas frente a uno de sus escaparates examinan diferentes posibilidades de seducción para la noche de enamorados. Ligueros, bustiers, bragas, picardías, tanguitas... La ropa ideal para un videoclip protagonizado por Robbie Williams y Killy Minogue. O Elton John y Rod Stewart en una noche de juerga y Jack Daniel's. Abierta hace dos años, la tienda es la primera que la firma británica Ann Summers, pone en circulación en España. Un espacio de moda erótica a medio camino entre el sex-shop y la tienda de lencería.
Más cerca y más tradicional es la oferta degustativa de una chocolatería
Hay regalos que han merecido los elogios de las protagonistas de 'Sexo en Nueva York'
"San Valentín -dice Alberto Cazallas, encargado del comercio- es una fecha clásica para muchas parejas que la convierten en una noche especial y nosotros tenemos muchas de esas cosas que la pueden hacer diferente". Creada por Jacqueline Gold, la marca Ann Summers se ha convertido en un referente internacional a la hora de hablar de moda sexy y objetos eróticos. "Aquí -señala Alberto- puedes encontrar desde cosas más románticas hasta toda una línea de fantasía y sorpresas para seducir o divertirte". Braguitas con pedacitos de chocolate que invitan a un fast food cargado de calorías, vibradores con los modelos más sofisticados, desodorantes para despertar la líbido más dormida con feromonas incorporadas o todo un prêt-a porter de bondage para darle una fiesta sorpresa de sado a tu chico o prometida.
Entre las estrellas de la casa figura el Rampant Rabbit -El conejo rampante- un consolador con función dual, clítoris y anal, que merecería los elogios de una de las protagonistas de Sexo en Nueva York. Los hay en diferentes modelos y a cual más atractivo para el observador primerizo: Platinum Elite, Thriller. Hasta podían pasar por algunos de los gadgets de Q, el inventor de los artilugios mortíferos de James Bond, como arma de destrucción sexual para el nuevo James Bond.
Dos chicas siguen sin decidirse por la prenda para celebrar su San Valentín. A mí, la verdad, si me pidieran consejo, el disfraz de enfermera voluntariosa en rosa shocking me parece muy sugerente para una noche donde estás obligado a todo tipo de cuidados intensivos.
Aunque este año San Valentín cae entre semana, las ofertas de escapadas para enamorados son unas de las bazas principales de las agencias de viajes en febrero. Ofertas que van desde el hotel con encanto a la orilla del mar, fin de semana con golf incluido o refugio de montaña en casa rural y velada romántica al calor de la chimenea como si fueras Steve McQueen y Faye Dunaway en El caso de Thomas Crown. Ahora, además, con la irrupción de las compañías de vuelos baratos hasta te puedes plantar con tu acompañante en medio de la plaza de San Marcos de Venecia o encima de una góndola por 10 euros por persona enamorada y el todo incluido. Y quien dice Venecia dice Reykiavk y darle a tu cuerpo serrano un buen baño geotérmico que te deja como nuevo y resplandeciente.
Más cerca y más tradicional, aunque desde un concepto de modernidad y diseño como mandan los tiempos, es la oferta degustativa que la chocolatería Cacao Sampaka ofrece para la efemérides. "Yo creo que San Valentín" -dice Rosa Doménech, directora de la tienda- "son tradicionalmente las rosas y los bombones. Nosotros no tenemos rosas, aunque tenemos algunos sabores a pétalos, pero tenemos nuestros bombones, que son un paraíso de sensaciones para el gusto".
Hace tres años que Doménech abrió en Valencia Cacao Sampaka, una tienda que se presenta como la alternativa urbana a las chocolaterías tradicionales. Este año para San Valentín, la empresa ha grabado el mensaje Love you en sus cajas de bombones revestido con el rojo sanvalentiniano. Como propuesta especial de la casa, Rosa, ha confeccionado un regalo compuesto a medias entre el paladar y la lectura. Un libro sobre el estilo y el glamour de Audrey Hepburn emerge entre surtidos de bombones y otras tentaciones gastronómicas.
Para los descubridores de experiencias menos tradicionales que llevarse un bombón al fondo del paladar -aunque este tenga sabores tan poco comunes como a vinagre de Módena o anchoa, que para algo el cocinero de las vanguardias culinarias unidas, Ferran Adrià, figura en el back stage- el fascinante mundo de Internet presenta diferentes opciones a la carta. Por ejemplo hacerle llegar a tu enamorado/a un desayuno sorpresa a manera de lote navideño, y con una carta donde se ofrecen entre otros, "desayuno romántico", "desayuno ternura" o "desayuno te quiero". Además de un surtido de bollería y un oso de peluche, la bandeja incluye una botella de cava, para que la cosa acabe más burbujeante aunque solo sean las siete de la mañana y así empezar más entonados la jornada. La misma empresa ofrece también opciones más "aventuradas" como un viaje en globo o un paseo en velero.
Otros que también podrán hacerse una idea de la magnitud de las fronteras del corazón por estas fechas son los 1.200 jubilados que llenarán la sala Olympia de Alboraia con el padrinazgo de la Concejalía de Bienestar Social, que ha preparado para la ocasión baile y merienda para los afortunados que puedan hacerse con una plaza el próximo 14 de febrero. Ya lo ven, San Valentín, siempre vuelve por estas fechas.
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