Del seguro al ladrillo

Un antiguo colaborador de César Bardají cuenta que, cuando salía de una reunión con el entonces presidente de la aseguradora Winterthur España y regresaba a su escritorio, se encontraba un correo electrónico con el memorándum de los puntos tratados en la reunión, las conclusiones alcanzadas y el plazo de tiempo fijado para cada una de las medidas acordadas. "No es algo que esperas del presidente de una gran compañía, pero Bardají no fue el alto ejecutivo típico del sector seguros", apunta.

Bardají (Barcelona, 1957) relevará a Josep Maria Farré al frente de la compañía inmobiliario Renta Corporación el 22 de febrero tras siete años de trabajo en el mundo de los seguros. Este cambio de traje no es excepcional en el ejecutivo catalán, que aterrizó en Winterthur en 2000 procedente de un sector tan ajeno a los seguros como es el consumo, ya que anteriormente había desempeñado papeles directivos en Matutano, grupo Pepsico, y la multinacional Procter & Gamble. "De pronto llegó alguien del gran consumo a un sector tan conservador como el de los seguros y definió una nueva estrategia de distribución muy moderna, muy parecida a la de cualquier otro producto de primera necesidad", explica un empleado de Winterthur.

Ingeniero Industrial y máster en Economía y dirección de Empresas por la escuela de negocios IESE, inició su carrera profesional en Transporte Metropolitanos de Barcelona y después fichó por Procter & Gamble. Posteriormente, incorporado a Pepsico, trabajó durante año y medio en Australia y durante otros siete en Portugal. En esa época tuvo a sus tres hijos, que hoy tienen entre 15 y 18 años.

Nunca llega a la oficina más tarde de las siete o siete y media de la mañana y admite que es un ejecutivo muy meticuloso. "Pero no soy un workalcoholic" (adicto al trabajo), se afana en matizar. "Lo que sí creo es que a veces el coste de no trabajar una determinada hora es enorme para una empresa", añade.

Cree que el sector inmobiliario, el de la alimentación o el de los seguros no son tan distintos entre sí, se trata de satisfacer a los clientes y, lo más importante, hacerlo antes que los demás. "Hacer las cosas bien por supuesto es fundamental, pero también hacerlas rápido, la velocidad es una gran ventaja competitiva", opina el nuevo próximo consejero delegado de Renta Corporación. Le gusta caminar por la ciudad mientras cocina ideas, barrunta sobre asuntos de trabajo, un trabajo que, reconoce, le deja a veces poco tiempo para otras aficiones como los paseos en bicicleta o el tenis. Los paseos los seguirá dando por la Diagonal de Barcelona, donde, al igual que Winterthur, tiene la sede Renta Corporación.