Sigue la racha alcista

El Ibex 35 termina esta última sesión con un nuevo máximo histórico de 14.875,50 puntos y un máximo intradía de 14.927,20 puntos. El avance de esta jornada fue del 0,33% y del 1,67% en la semana, con lo que son ya siete semanas consecutivas de ganancias.

La estrategia de los inversores de tomar beneficios sobre la marcha está consiguiendo el doble efecto de consolidar posiciones y de superarlas constantemente en un juego que beneficia, sobre todo, a la inversión a corto plazo, pero del que los accionistas también sacan provecho.

Las expectativas empresariales continúan siendo muy positivas y se dan en un entorno económico estable, lo cual permite a los inversores olvidarse de los peligrosos vaivenes del precio del petróleo y de esa, al parecer, inevitable consecuencia que será la subida de los tipos de interés. En este sentido, en el mercado se admite que el presidente del BCE tiene razón al afirmar que los tipos de interés son históricamente bajos, razón por la cual la renta variable puede asumir algunas subidas más sin grandes quebrantos.

La rentabilidad de los bonos en el mercado secundario de deuda subió ayer cinco puntos básicos, hasta el 4,14%, en un movimiento acorde con las perspectivas de los inversores sobre los tipos de interés.

La ausencia de indicadores económicos importantes en esta sesión dio cierta libertad a los inversores en los mercados de renta variable, aunque la apertura de la Bolsa de Nueva York trajo consigo un descenso del optimismo que, según una opinión muy extendida, le venía bien a un mercado propenso a las alegrías desmesuradas.

Esa opinión estaba avalada, en esta ocasión, por la facilidad con que habían subido las cotizaciones sin que el volumen negociado guardara demasiada relación. De hecho, en el mercado continuo el negocio bajó hasta 5.310,58 millones de euros.