Medio Ambiente anula el proyecto de puerto deportivo vigués en Canido

La Consellería de Medio Ambiente ha rechazado el proyecto del puerto deportivo de Canido, en Vigo, al concluir que es "incompatible con el mantenimiento de las condiciones ecológicas" de la zona. Así lo sostiene en la declaración de impacto ambiental del proyecto, que había sido adjudicado al Club Marítimo de Canido para la ejecución de un puerto con capacidad para 139 plazas, y que había recibido una fuerte contestación social.

Precisamente el rechazo de distintos colectivos, materializado en "numerosas alegaciones", es uno de los motivos de la declaración de impacto ambiental negativa firmada por el director general de Calidad y Evaluación Ambiental, Joaquín Lucas Buergo, que apela también a las modificaciones en la dinámica litoral que provocaría el puerto, en concreto, el trasvase de arena hacia el oeste en la playa de Canido, una de las principales del litoral vigués.

El puerto deportivo de Canido -el mayor de los que están en proyecto en el litoral vigués- fue promovido por Portos de Galicia cuando dependía del ex conselleiro Alberto Núñez Feijóo, del PP, y preveía una ocupación de 31.686 metros cuadrados, con una una lámina de agua de 16.314 metros cuadrados.

El actual presidente de Portos, Vicente Irisarri, emitió un informe que ha servido de base a la declaración de la Consellería de Medio Ambiente, que rechaza la medida correctora propuesta a la modificación de la dinámica litoral, basada en la aportación de arena, por no estar "suficientemente estudiada, proyectada, ni presupuestada".

Las aportaciones de arena, concluye el informe, "no se considera que sean prácticas ambientales sostenibles", ya que la conservación estética y recreativa de las playas "debe basarse fundamentalmente en las características naturales en equilibrio con la geodinámica marina". La declaración de la Xunta también argumenta que no está garantizada la ausencia de afecciones a otras playas del entorno, como el Vao -la segunda más importante de Vigo- o Fuchiños.

La ejecución del proyecto provocaría afecciones al banco natural marisquero del Vao, "de gran importancia desde el punto de vista económico", puesto que se trata del que aporta la mayor parte del marisco que se vende en la lonja de Canido. La declaración de impacto ambiental rechaza asimismo "impactos visuales", ya que ocultaría parcialmente la vista de las islas Cíes desde la playa de Canido y de parte de la de Toralla. El informe concluye que "no es conveniente la realización del proyecto".