¿Dónde está mi gimnasio?
Un centro deportivo de Fuenlabrada deja en la calle a 1.500 socios después de cobrarles las cuotas por adelantado
María del Mar Peláez salió el lunes 22 por la tarde de su clase de spinning (gimnasia en bicicleta). Ella, su marido y sus dos hijas van desde hace casi un año al gimnasio Nuovo Sportive, en Fuenlabrada. Quedó para el día siguiente a la misma hora y dijo adiós en la puerta sin sospechar nada. "El dueño estaba formalizando matrículas como cualquier otra tarde", recordaba ayer en su casa.
Pero al día siguiente, el gimnasio amaneció cerrado a cal y canto. En la entrada del local se arremolinaban los socios con sus mochilas, su ropa deportiva y su cara de sorpresa. También se presentaron algunos monitores sin saber que ya no darían más clases. Sobre el negocio pesa una orden de desahucio por impago de 20 meses de alquiler que debe hacerse efectiva mañana. En el centro hay unos 1.500 socios, según el gerente del centro comercial Fuenlabrada 2, donde se encontraba el gimnasio.
La dirección del local deja como contacto un apartado de Correos de Cuenca
La deuda de los responsables del centro deportivo con la inmobiliaria Arocasa supera los 250.000 euros. "Hace unas semanas abrieron una sala de spa, ¿cómo íbamos a sospechar nada?", añadió María del Mar.
"El primer día ni siquiera sabíamos a quién dirigirnos. Intentamos hablar con los dueños, pero habían desaparecido", recuerda la mujer. Su familia reclama más de 600 euros.
Otros afectados se habían apuntado a la última oferta, seis meses por 200 euros. La mensualidad oscila entre 24 y 60 euros, según la actividad. La promoción más cara, artes marciales, asciende a 485 euros por 13 meses. A Manuela F., que prefiere no dar su apellido, le deben 402 euros. Estaba apuntada en el Nuovo Sportive con su hija y un sobrino. "Me avisó una amiga por la mañana. Nadie nos advirtió de que iban a cerrar. La tarde anterior seguían cobrando", explicó ayer por teléfono.
Los afectados acudieron primero a la oficina de Consumo del Ayuntamiento de Fuenlabrada, donde les explicaron que habían sido estafados y que tenían que poner denuncias, según una portavoz municipal.
Los juzgados de Fuenlabrada han recibido 300 reclamaciones de dinero de clientes del centro deportivo en los últimos días y la comisaría otras 137 denuncias. Luis Castro, responsable de mantenimiento del gimnasio, calcula que los afectados son más de 1.500, porque "el número de afiliados iba ya por 2.800". A él le deben 1.350 euros del último mes y medio, más el finiquito por un año y dos meses, que aún no ha calculado. También se presentó a trabajar sin sospechar que iba a encontrar el local cerrado.
"Ni siquiera me dieron de alta en la Seguridad Social, me mintieron", explicaba ayer por teléfono. "Ya me extrañaba a mí que hicieran ofertas tan baratas a los clientes. Les decían que pagaran en metálico porque la tarjeta no funcionaba y se han llevado en mano todo su dinero. Menudo timo", añadió. Él se ocupaba de arreglos y limpieza, desde pintar una pared a revisar la instalación de la luz. En el gimnasio trabajaban otras 15 personas. "A muchos de ellos también dejaron de pagarles en noviembre", asegura Castro.
Ninguno de los responsables del centro, Rubén F. y Marta C. F., respondía ayer al teléfono. "Están desaparecidos", se queja Castro. Pero ambos han vuelto un par de veces al local para hacer la mudanza. "Han venido de madrugada a retirar los muebles y los aparatos que quedaban", explicaba ayer Fernando Rodríguez, gerente del centro comercial Fuenlabrada 2, que también era socio del gimnasio. "Aparte del follón, me han hecho una faena, porque podía hacer deporte aquí al lado y ahora no sé dónde voy a ir", bromeaba ayer en su oficina, a escasos metros del Nuovo Sportive.
Las instalaciones incluían sala de squash, rayos UVA, masaje, gabinete de dietética, guardería, depilación láser, venta de ropa y cafetería, entre otras ofertas. Ayer no quedaba ni rastro de ninguna. Una botella de bebida isotónica en el suelo de la entrada del local era la única huella de su actividad una semana después de la estampida, además del enorme cartel con el nombre del gimnasio. Un papel anunciaba el "cierre definitivo" de la empresa, por la "imposibilidad de acuerdo con la comunidad de propietarios. Firmado: la Dirección".
En la misiva, se recomienda a los usuarios apuntarse a otro gimnasio de Fuenlabrada -que les va a admitir- para no perder las mensualidades. Para los que prefieran reclamar, la nota ofrece un apartado de Correos. En Cuenca.
Ni un solo pago
Los gerentes del Nuovo Sportive alquilaron el local de dos plantas y 2.500 metros cuadrados en abril de 2005 a la inmobiliaria Arocasa. Pero tampoco llegaron a hacerse cargo de los pagos.
La factura asciende a 10.000 euros al mes, más 2.700 de pago de comunidad. No abonaron "ni una sola mensualidad" desde la firma del contrato, según aseguró ayer Pablo Lalanda, director de ventas de la inmobiliaria. Arocasa pagó al centro comercial los recibos de la comunidad.
La inmobiliaria denunció el impago y se metió en un pleito, que ha concluido con una orden de desalojo de un juzgado de instrucción de Fuenlabrada para mañana. No es la única deuda. El gerente del centro comercial, Fernando Rodríguez, aseguró ayer que tampoco abonaron los recibos del agua, unos 6.000 euros a razón de 300 cada dos meses. "Ni siquiera pagaron los carteles y las lonas de promoción, que tuvimos que retirarlos después de muchos avisos", concluye Rodríguez.
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