Montilla ofrece a Mas estar en tres de las cinco comisiones del Estatuto

Artur Mas cree que ayer José Montilla sólo le ofreció "un dedo". El Gobierno opina que tendió "las dos manos" a la oposición nacionalista para consensuar el desarrollo del Estatuto y los grandes temas de "país": inmigración, infraestructuras e I+D y vivienda. Dos diagnósticos dispares sobre la primera reunión entre el presidente de la Generalitat y el jefe de la oposición parlamentaria que sirvió para evidenciar la voluntad mutua, en mayor o menor grado, de diálogo "permanente". El tripartito dijo que cumple su palabra de "mano tendida", pero Mas se quedó "insatisfecho" porque CiU no estará presente en todas las comisiones bilaterales entre el Gobierno catalán y el central para desplegar el autogobierno.

Artur Mas puso ayer dos condiciones para reanudar el diálogo con el Gobierno autónomo. Primera, que las tres formaciones del tripartito adopten una posición unitaria sobre cada uno de los temas objeto de negociación. Segunda, que el tripartito incorpore, al menos en parte, propuestas de los nacionalistas, es decir, que no sean unos meros invitados o "comparsas". El primer requisito se cumplió. Antes de la entrevista entre Mas y Montilla, el presidente de la Generalitat se reunió con el republicano, Josep Lluís Carod -que además actuó de portavoz- y el ecosocialista, Joan Saura, para unificar criterios y concretar la oferta que, minutos después, brindarían al líder nacionalista.

Para consensuar las grandes prioridades políticas, ayer Montilla y Mas pusieron la primera piedra en una entrevista que se prolongó durante más de una hora y media. El desarrollo del Estatuto consumió la mayor parte de la reunión. El presidente ofreció a Mas que CiU esté presente en tres de las cinco comisiones de despliegue del autogobierno, pero no en la bilateral con el Ejecutivo central y en la de asuntos económicos y fiscales de carácter, a su juicio, estrictamente gubernamental. "El Estatuto dice lo que dice y no dice otra cosa", proclamó Carod.

Consejo asesor

En cambio, el resto de los partidos políticos tendrán representantes en tres comisiones: infraestructuras, traspasos y el consejo asesor. En la de infraestructuras, que estipula el nuevo Estatuto, CiU estará a través de las dos asociaciones municipalistas de Cataluña, y en concreto la ACM, de tinte nacionalista. Las otras dos comisiones constituyen la principal novedad de la oferta de Montilla. Así, el Gobierno catalán mantendrá la Comisión Mixta de Traspasos Estado-Generalitat, fijada en el anterior Estatuto, con presencia de todas las formaciones políticas. Pero, además, se creará un consejo para el impulso y seguimiento del despliegue del Estatuto que se convocará con anterioridad a las reuniones de las comisiones bilaterales con el Ejecutivo central.

Este nuevo órgano, de entre 6 y 12 miembros, no será de carácter vinculante sino que servirá para, en la medida de lo posible, adoptar una posición negociadora común de la parte catalana. Carod no concretó el funcionamiento ni la composición de este nuevo organismo asesor.

Esta inconcreción, y el hecho de que CiU no participará en las comisiones bilaterales, no satisfizo en absoluto a Artur Mas, que anunció la presentación de una contraoferta en los próximos días. "Es una propuesta a la baja, que se queda corta", declaró. En su comparecencia posterior, el líder nacionalista midió al milímetro sus palabras para evitar dar una sensación de entusiasmo, pero tampoco de fracaso. Se limitó a subrayar que las propuestas del presidente catalán le parecían insuficientes, pero que CiU siempre ha sido una formación dispuesta al diálogo. Eso sí, advirtió que no pondrá las "cosas fáciles" al tripartito.

Sobre los grandes pactos en materia de infraestructuras, vivienda e inmigración, el líder nacionalista precisó que, a tenor de lo manifestado por los dirigentes del tripartito y lo que figuraba en sus respectivos programas electorales, el acuerdo se presenta complicado. "No estamos por imponer multas a los propietarios de viviendas vacías ni expropiarlas", señaló.

Montilla planteó al jefe de la oposición otras propuestas, que la próxima semana expondrá al popular Josep Piqué y al presidente de Ciutadans, Albert Rivera. Por la noche, en Reus, el presidente señaló que una de sus obligaciones es buscar la "complicidad y colaboración" con el resto de partidos.

- Jefe de la oposición. El Ejecutivo catalán presentará en breve en el Parlament la reforma de la ley del presidente y del Gobierno para regular la figura del jefe de la oposición -con rango de consejero- y del vicepresidente. CiU dispondrá del anteproyecto antes de su aprobación por el Consell Executiu.

- Ley electoral. Mas emplazó a Montilla a aprobar en esta legislatura la ley electoral, pues Cataluña es la única comunidad que no dispone de una norma propia. El presidente comentó que la voluntad del Gobierno es redactarla en una ponencia parlamentaria. Su aprobación requiere una mayoría de dos tercios. También se discutirá en ponencia la nueva ley de los medios de comunicación públicos.

- Justicia. El presidente -Mas se mostró a favor- propuso hacer frente común en el Congreso de los Diputados de los partidos catalanes en la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial para adaptarla a lo fijado en el nuevo Estatuto catalán.

- Agencia Tributaria. CiU considera este proyecto de ley poco ambicioso pues, en su opinión, crea una Agencia Tributaria análoga a la Dirección General de Tributos. Mas exhortó a suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones.