Vicente Boluda Crespo, empresario

Vicente Boluda Crespo, nacido en Valencia en 1929, pertenecía a una de las grandes familias de empresarios valencianos del sector portuario. Transformó la compañía de transporte de mercancías de su padre en un grupo con empresas navales, inmobiliarias y turísticas. Falleció el 20 de enero.

Vicente Boluda Crespo formaba parte de una de las grandes familias valencianas relacionadas con el sector portuario. Un negocio que emprendió su padre, Vicente Boluda Marí (1904-2000), él continuó, y al cual, debido a una grave enfermedad, la neuritis óptica, dio paso pronto a su hijo, Vicente Boluda Fos (actual presidente de Aguas de Valencia), abriendo una época en la que los tres miembros de la misma familia compartieron la responsabilidad de dirigir la compañía.

Boluda Crespo estudió en el colegio Hermanos Maristas de Valencia y cursó más tarde estudios de perito mercantil. Pasó a encargarse de la administración del negocio fundado por su padre en los años cincuenta. Al igual que su familia, Boluda Crespo estuvo siempre muy ligado al Grao de Valencia y al resto de poblados marítimos de la ciudad. Seguramente de esa relación provenía su fidelidad incondicional al Levante Unión Deportiva. Fue también notoria su implicación con la fiesta fallera, llegando a ocupar distintos cargos en el casal de Pizarro Cirilo-Amorós-Hernán Cortés-Colón.

Lo que mucho tiempo después llegaría a convertirse en el Grupo Boluda, con un entramado económico que se extiende por varios continentes, comenzó a principios del siglo XX. Vicente Boluda Marí, su padre, compró a principios de la década de los veinte, con tan solo 16 años, y empleando su herencia familiar, un barco remolcador a medias con otro socio. Con él llevaban naranjas a los grandes buques que fondeaban en el puerto de Valencia. Dos años después, en una época en la que la ciudad seguía viviendo del estímulo económico que implicó la neutralidad española durante la I Guerra Mundial, ya disponía de varios barcos.

El negocio de los remolcadores de los Boluda creció y a partir de los años sesenta se extendió a otros puertos de España y más tarde a los de otros lugares del mundo, como Oriente Medio y Latinoamérica y alcanzó una posición de dominio en el Canal de Panamá.

El grupo fue cubriendo progresivamente todas las áreas del transporte de mercancías, que pareció quedársele corto. A mediados de los noventa se extendió al sector de astilleros, al inmobiliario, al turístico, al de suministro de agua... Una de las pocas espinas que le queda a la saga familiar fue la de no haber logrado hacerse con Transmediterránea, hace pocos años, cuando la compañía fue privatizada.