El corte de la avenida de Portugal provoca atascos que llegan hasta Móstoles
Las obras de la M-30 dejan inhabilitado este tramo hasta mediados de febrero
El corte al tráfico de la avenida de Portugal, a causa de las obras de remodelación de la M-30, provocó ayer 25 kilómetros de atascos en la A-5, según informó la Dirección General de Tráfico (DGT). Los problemas comenzaron antes de las siete de la mañana y se mantuvieron hasta poco antes del mediodía. La entrada a la capital por este acceso permanecerá inhabilitada hasta que se abra el tráfico por el túnel de la M-30 que está construyéndose. El Ayuntamiento cree que en "dos o tres semanas" se inaugurará este tramo que ya funciona en sentido salida.
El corte del tramo final de la avenida de Portugal ocasionó ayer una caravana de hasta 25 kilómetros en la A-5 en sentido Madrid, según datos facilitados por la DGT. La causa fue el cierre de esta calle en su confluencia con el paseo de Extremadura. El mal tiempo a esas horas -lluvia y niebla- también contribuyó a las retenciones.
El Ayuntamiento avisó de esta interrupción del tráfico, que se produjo en la noche del sábado, pero fue ayer el primer día laborable y cuando la restricción se dejó notar. Este corte es necesario para conectar los túneles de la avenida de Portugal con la glorieta de San Vicente. En sentido salida ya están en funcionamiento, pero no en el de entrada.
Como rutas alternativas, el Ayuntamiento de Madrid recomienda para llegar al centro de la ciudad salir por la avenida del Padre Piquer (Carabanchel-Campamento), tomar la avenida de los Poblados y seguir por la Vía Lusitana a la A-42.
Para los accesos al este de la ciudad se aconseja el eje M-40, A-4 y bypass hacia la M-30, así como la entrada desde la M-40 por la M-503 y M-500 hasta el puente de los Franceses.
Los coches que circularon el pasado sábado hasta el momento de la irrupción del tráfico fueron los últimos que lo hicieron en superficie porque las obras que realiza la Concejalía de Urbanismo dentro del proyecto de reforma de la M-30 suponen soterrar 1,5 kilómetros de esa avenida en su entrada a Madrid. Cuando esta vía sea reabierta, la entrada se producirá ya a través de un túnel que enlazará después con el tramo también soterrado de la M-30, junto al río.
Ayer la caravana de coches de entrada a Madrid estaba formada por conductores desesperados. "Yo he tardado hora y media desde Alcorcón", decía uno. "Pues yo hora y cuarto desde Móstoles", añadía otro. Los usuarios en muchos de los casos no sabían que el corte al tráfico de la avenida de Portugal se había producido.
El Ayuntamiento de Madrid no quiso facilitar datos de estas retenciones. "No se produjeron en la capital, sino en la entrada a la ciudad. En la M-30 se circuló sin problemas, y de hecho ayer fue un día en que hubo menos tráfico". El portavoz no supo evaluar en cuánto disminuyó la intensidad de vehículos. Cada día entran y salen de la ciudad un millón de coches.
Las obras comenzaron en mayo de 2005 y han costado 132 millones de euros. Los técnicos municipales calculan que será utilizado por 20.000 vehículos diarios y que acortará notablemente el viaje entre la capital y los municipios de Alcorcón y Móstoles, además de la conexión del distrito de Latina con el resto de la ciudad.
La Plataforma M-30 No Más Coches dijo ayer que el "caos de tráfico" en los accesos a Madrid se produjo por la ausencia de "alternativas eficaces" al cierre. "El Ayuntamiento se gasta 150.000 euros diarios en autobombo y propaganda de las obras de la M-30 y no se ha molestado en informar adecuadamente a los vecinos sobre esta incidencia, ni en disponer medios públicos alternativos suficientes ni rutas viables para quien no tenga más remedio que recurrir al vehículo privado", aseguró un portavoz de este colectivo.
"Por causa de los atascos generados artificialmente por falta de planificación vial y por la irresponsabilidad del Ayuntamiento, los ciudadanos madrileños perderemos millones de horas de trabajo, y el ambiente de Madrid se volverá más irrespirable aún", denuncia este colectivo.
Plan de movilidad
El portavoz del grupo municipal socialista, Óscar Iglesias, exigió al Ayuntamiento que "ponga en marcha medidas urgentes para paliar el atasco permanente provocado por la mala planificación de las obras y potencie servicios especiales de transporte público".
Iglesias considera necesario que mientras duren las obras de la M-309 se informe "adecuadamente" a los madrileños y se busquen alternativas para que éstos no se vean abocados a padecer diariamente kilómetros de atascos. "Es necesario", añade el portavoz socialista, "un plan integral de movilidad ante la caótica situación del tráfico en Madrid".
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