Un hombre muere en Benafer al estallar una bombona de gas
Los bomberos hallan el cadáver calcinado en el interior de la casa
Un hombre, de alrededor de 30 años, murió ayer tras estallar una bombona de gas butano en la casa que habitaba, en el municipio castellonense de Benafer. Los bomberos hallaron el cadáver calcinado después de sofocar las llamas de la vivienda. El accidente se produjo alrededor de las 13.15 horas cuando un vecino alertó al 112 de una explosión que dijo haber oído en una vivienda cercana.
El primer aviso fue seguido de otros varios que alertaron al servicio de emergencias no sólo por la explosión sino por la intensidad de las llamas que envolvieron la vivienda en pocos segundos.
El ahora fallecido se encontraba en una casa de campo en el término de Benafer, en la comarca del Alto Palancia, en la carretera que une los municipios de Jérica y Caudiel.
La vivienda tenía dos plantas de apenas unos treinta metros cuadrados cada una. La magnitud de la deflagración alertó a los poco más de un centenar de vecinos que residen en la población.
Tras el primer aviso al 112, se trasladaron al lugar efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos, Guardia Civil y Policía Autonómica. Además, se dio aviso al Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) a pesar de que, en un primer momento, los vecinos informaron de que creían que la casa no estaba habitada porque se encontraba en construcción y se desconocía si había personas heridas en su interior. También se dio aviso a la empresa Repsol con el fin de que enviara algún técnico por si su asistencia fuera necesaria, según las mismas fuentes.
Destruida por el fuego
Al llegar al lugar de los hechos, los bomberos hubieron de sofocar las llamas, provocadas por la explosión, que afectaban a la totalidad de la casa, que quedó prácticamente destruida por el fuego.
Poco después, encontraron, en el interior de la vivienda, el cadáver totalmente calcinado de un hombre de unos 30 años.
La provincia de Castellón ha sido escenario, en el último mes, de varios accidentes provocados por fuentes de calor. Hace apenas cinco días, un hombre de 36 años resultó herido por quemaduras cuando manipulaba una chimenea en la Masía La Toba, situada en el término municipal de Cortes de Arenoso en una zona muy cercana a la provincia de Teruel.
Entonces, el accidente precisó de la asistencia del helicóptero medicalizado que trasladó al herido a la unidad de quemados del Hospital La Fe, donde se le diagnosticaron quemaduras de primer grado en el 25% de su cuerpo.
El pasado día de Nochevieja, dos jóvenes murieron en el mismo municipio de Cortes de Arenoso a causa de la intoxicación que les produjo el mal funcionamiento de una caldera de gasóleo que se encontraba en la casa en la que descansaban apenas unas horas antes de despedir 2006.
