Farruquito ha sido "bien recibido" por los internos de la cárcel

Juan Manuel Fernández Montoya, condenado a tres años de cárcel por un delito de homicidio imprudente y otro de omisión del deber de socorro, fue trasladado a las cuatro y media de la tarde de ayer a una celda del módulo uno de preventivos de la cárcel de Sevilla, a propuesta del equipo técnico que a lo largo del día de ayer se entrevistó con él.

Le acompaña un recluso de 37 años. Farruquito "está algo impresionado y todavía desorientado" por el "ambiente" de la prisión, según fuentes del centro penitenciario. "Ha sido bien recibido. No se ha apreciado ninguna actitud de rechazo hacia él por parte de los internos", dijeron.

El fin de semana podrá recibir la visita de cuatro personas autorizadas. En el módulo uno de preventivos hay 44 celdas y, a día de ayer, 82 reclusos. Dispone de patio, economato, comedor y sala de televisión. En este espacio cumplirá su pena.

Benito Saldaña, el abogado del bailaor, dijo a Efe que su cliente se ofrecerá para trabajar y se inscribirá en alguno de los talleres de actividades. Todo ello le servirá para redimir condena y para conseguir permisos penitenciarios de fin de semana. De hecho, Saldaña espera que Fernández Montoya consiga los primeros permisos penitenciarios en ocho o nueve meses. "Colaborará en lo que pueda y trabajará en lo que le propongan", afirmó.

Saldaña señaló que el ser famoso "ha perjudicado indudablemente a Farruquito porque hasta ahora nadie había ingresado en prisión por un hecho similar".

Actividades

El bailaor podrá trabajar en la prisión, hacer deporte, recibir clases o participar en los talleres que existen, entre ellos un taller musical. El interno incluso puede proponer alguna actividad a los directivos que tendrían que evaluar y autorizar su realización.

Si Farruquito elige trabajar para reducir condena podrá hacerlo en la cocina, el economato o la lavandería. Puede inscribirse, si lo desea, en un curso de formación de los que ofrece el centro, como carpintería metálica. Puede, también, participar en algún taller de pintura, de manualidades, deportivo o musical. Incluso puede asistir a clase en función de su nivel educativo.

Farruquito recibirá la dieta visada por el equipo médico, como cualquier interno. En la prisión hay menús para musulmanes, diabéticos, jóvenes que precisan más aporte calórico o para enfermos.

De momento, el bailaor no ha realizado ninguna "petición expresa" a la cárcel. "Es muy pronto", señalaron los responsables del recinto. Si lo desea, podrá adquirir un televisor, para instalarlo en su celda, a través del economato o bien recibir uno de su familia. En este último caso tendrá que pagar un servicio técnico contratado por la prisión para que revise y compruebe que el aparato no esconde ni droga ni armas. Así lo estableció un auto del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Sevilla hace unos años.