EA pide respeto al liderazgo de Ibarretxe

El secretario de Organización de EA, Rafa Larreina, pidió ayer respeto al liderazgo institucional que debe tener el lehendakari a la hora de convocar manifestaciones para responder desde las instituciones vascas a la nueva situación creada tras la ruptura del alto el fuego por parte de ETA. El dirigente de EA espera de todos los partidos un "esfuerzo" para que se respete el papel de cada uno en estos momentos y para que "no utilicemos ninguna iniciativa de unos contra otros", de forma que la marcha convocada bajo el lema Por la paz y por el diálogo no sirva como excusa para el enfrentamiento entre partidos, porque es momento "de cerrar filas", explicó a este periódico. En ese mismo sentido, desde la Lehendakaritza se defendió la iniciativa institucional y se indicó que se respetará a quien no quiera sumarse a la marcha con el lema propuesto por Ibarretxe, eslogan que, en principio, no está previsto que vaya a cambiarse.

El presidente del PNV en Guipúzcoa, Joseba Egibar, aseguró ayer que la manifestación convocada por el lehendakari es un acierto, porque supone un "dique de contención social para que esto [el proceso] sea irreversible". Egibar, en declaraciones a Radio Euskadi, se mostró convencido de que "la sociedad no va a permitir la vuelta atrás" a los atentados de ETA, ni tampoco que los vascos no puedan decidir "libre y democráticamente su futuro". Por eso Egibar cree acertada la convocatoria de Ibarretxe, "para que el ciudadano exprese en la calle lo que realmente siente" y la sociedad deje de ser mera "espectadora" en un proceso en el que "los protagonistas eran otros".

El coordinador de Ezker Batua y miembro del Consejo Político del Ejecutivo vasco, Javier Madrazo, dijo que, si socialistas y Batasuna "fueran coherentes con sus declaraciones públicas a favor de la paz y el diálogo, el sábado 13 estarían en la manifestación de Bilbao". Sin embargo, Madrazo cree "obvio" que Batasuna no entiende que paz significa "rechazar la violencia" y que tampoco el PSE considera que "diálogo significa respeto a la voluntad mayoritaria de la ciudadanía vasca y sus instituciones".