El PSPV teme un retraso del Tram de Alicante tras la decisión judicial

Preocupación e interrogantes. La decisión de la titular del juzgado número cinco de lo Contencioso Administrativo de Valencia de anular la adjudicación a la empresa Alstom (actualmente Vossloh) del contrato para fabricar nueve trenes para la red Tram de Alicante al considerar que no se respetaron las bases del concurso público siguió levantando ayer críticas. Los socialistas en el Ayuntamiento de Alicante acusaron al PP "de incompetencia, oscurantismo y soberbia". Y pese a que Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) aseguró el jueves que ha recurrido la decisión judicial y que el proceso no supondrá "ningún retraso" en la puesta en marcha de estos trenes, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Alicante, Manuel de Barros, mostró ayer sus dudas al respecto. "¿Cuánto tiempo retrasará esta sentencia el desarrollo del Tram en Alicante?", demandó De Barros. El responsable socialista también interpeló sobre el dinero público que "se perderá en esta operación". Fondos que no se emplearán en otros servicios públicos esenciales para los ciudadanos como la educación o la sanidad.

Los socialistas subrayaron, además, que la justicia "de nuevo" le ha quitado la razón el PP. "La adjudicación es ilegal y el Partido Popular debe rectificar", resumió el portavoz socialista alicantino.

También ayer, Andrés Perelló, portavoz adjunto del PSPV-PSOE, reclamó que "los culpables del perjuicio económico tienen que pagarlo de su bolsillo". Perelló criticó con dureza el coste económico que tendrá para los valencianos la forma de actuar del Consell y advirtió de que si al final FGV debe convocar de nuevo el concurso "la factura de esta negligencia de altos cargos del PP aún crecería más".

"Gestión catastrófica"

El Bloc, por su parte, defendió que en FGV llueve sobre mojado y por ello su secretario general, Enric Morera, exigió la dimisión del consejero de Transportes e Infraestructuras, José Ramón García Antón. Morera argumentó su decisión en "los escándalos que vienen azotando Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana desde hace unos meses" y en la "gestión catastrófica" de esta empresa pública.

El Bloc crítico el "trato de favor" y las "irregularidades legales" cometidas por la dirección de FGV en el concurso del Tram. Y denunció que FGV se "permite el lujo" de gastarse 18 millones de euros en una adjudicación "irregular". El secretario general del Bloc se mostró convencido de que con una mínima parte de esa cantidad se hubieran instalado los sistemas de seguridad adecuados en la línea 1 del metro de Valencia, con lo que se habría evitado las 43 muertes producidas en el accidente registrado el tres de julio del año pasado.

El contrato para fabricar nueve trenes para la línea Tram de Alicante -que ahora discurre entre esta ciudad y El Campello pero que está previsto que se amplíe hasta Dénia- salió a concurso en 2001. Una de las empresas que presentó oferta, CAF, recurrió la decisión en un proceso en el que se le ha dado la razón. Pese a ello, siete de los nueve trenes han sido entregados.