"Me ofreció coches, pisos, móviles..."

"Me ha ofrecido cuatro pisos, cinco coches, cinco móviles, veinte billetes de avión... y las entradas de los toros también. Tengo muchísimas cosas y estoy tranquilo". Luis Fernández no paró de bromear con Lopera a costa de la presunta carestía de su fichaje como nuevo entrenador del Betis, donde sustituye a Irureta. Lo hizo en su presentación, junto al dueño del club, que confía en él para sacar al Betis de las mazmorras de Primera División. "Llevo mucho tiempo siguiendo la Liga española, y el Betis tiene muy buena plantilla, confío en ella y creo que se puede sacar adelante, pero en el mes de enero no tenemos tiempo para pensar, hay que trabajar para darle alegrías a la afición. Será difícil y vamos a hacer un equipo competitivo con lo que hay", sentenció Fernández en su presentación. El Betis es antepenúltimo con 13 puntos y tiene la salvación a dos.

En San Mamés con el Athletic y en Montjuïc con el Espanyol, el hispano-francés celebró sus gestas a lo grande, con toreo de salón incluido. Con una ikurriña como capote festejó la clasificación de los rojiblancos para la Liga de Campeones. A pecho descubierto, con su camisa como tela de trabajo, conmemoró la salvación de los catalanes la última jornada de Liga con otro lote de medias verónicas. Como a los toreros antes de saltar al ruedo, el máximo accionista del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, manifestó que en su nuevo club, pese a su capacidad, también va a necesitar suerte, "no se le van a pedir milagros desde primera hora", aseguró.

El sustituto de Javier Irureta en el banquillo verdiblanco tiene contrato hasta el 30 de junio, sin "ninguna cláusula de renovación", según indicó Lopera. Fernández, cuya primera sesión de trabajo tendrá lugar hoy, llega acompañado por el preparador físico italiano Feliciano di Blasi y por el chileno Julio César Moreno, que será el segundo entrenador.

Del dúo Lopera-Fernández se puede esperar de todo. Derrochan tanta pasión, para lo bueno y para lo no tan bueno, que el cruce de caminos entre ambos es capaz de deparar cualquier cosa. Ayer, a simple vista, se sentían a gusto. El tarifeño se reía sin disimulo con el dirigente, y éste parece que se ha soltado el nudo de la corbata con la llegada del nuevo entrenador. En tono jocoso, manifestó que Luis Fernández y su cuerpo técnico le parecían "muy caros" hasta que tuvo conocimiento "del currículum de este preparador físico [Di Blasi] que, con todos los respetos, nunca ha estado en el Castilleja", bromeó Lopera.

Con un acento francés un poco más marcado, el aliño ventoso de Tarifa todavía es reconocible en su soniquete mezcla de francés y andaluz. El técnico se mostró contento de volver a España "aquí estoy en mi tierra". Fernández indicó que cuando era niño el Betis era el club que le gustaba, y piensa que aquí se va a volver a oxigenar. Tras negar que sus peticiones económicas estuvieran a punto de arruinar el trato, mandó un mensaje a sus nuevos jugadores: "Tengo que sentir que la gente está a disposición, que los que se queden lo hagan con ganas de ayudar. Que los que tengan ganas de irse lo digan y no pasa nada, pero que los que se queden lo hagan con la convicción de sacar esto", expresó.