"Me gustaría hacer de Doñana un centro de referencia mundial"

Ginés Morata (Rioja, Almería, 1945) es el recién nombrado presidente del Consejo de Participación del Parque Nacional de Doñana, el nuevo organismo de gestión del espacio, cuyas competencias han sido transferidas a la Junta de Andalucía. El Consejo de Participación, que sustituye al antiguo Patronato y a la Junta Rectora, tendrá bajo su mando a las más de 108.000 hectáreas de espacio protegido. Será un órgano de coordinación y representación de los sectores sociales, políticos y económicos del parque y su área de influencia. Ginés Morata es investigador del Centro de Biología Molecular del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Cuenta con numerosos reconocimientos nacionales e internacionales y fue Medalla de Andalucía en 2003. Una de sus primeras investigaciones fue sobre el alcotán, una de las numerosas aves que habitan Doñana. Precisamente, sobre las aves y uno de los principales problemas que ha sobrevolado el horizonte de Doñana -la gripe aviar-, Morata señala. "A pesar de que se pensaba que el virus se iba a extender rápidamente, también por el Parque, se ha visto que no. Parece que los animales salvajes no son las principales vías de transmisión. Al menos hasta el momento. De todas maneras me constan que los controles en Doñana siguen siendo exhaustivos".

"Haber elegido a un científico por parte de la Junta significa que se quiere dar más énfasis al desarrollo científico del Parque Nacional"

"No tiene por qué haber un choque de intereses entre un desarrollo sostenible de la zona y un mantenimiento de Doñana"

Pregunta. ¿Qué cree que significa que se haya optado por un liderazgo científico al frente de este nuevo organismo, en lugar de una figura más política?

Respuesta. Entiendo que haber elegido a un científico por parte de la Junta significa que se quiere dar más énfasis al desarrollo científico del Parque Nacional. Porque lo más importante del mismo es que es un patrimonio único, de una biomasa extraordinaria, con una colección de especies de gran interés faunístico y ecológico. El valor científico y de conservación es lo que me parece más importante del Parque. Quizás por eso han nombrado a un científico mejor que a un político.

P. ¿Con su nombramiento gana peso específico el CSIC dentro del Parque Nacional de Doñana?

R. No creo que la cuestión sea que una institución gane respecto a otras. Espero que quien gane sea Doñana. Yo soy miembro del CSIC, pero no estoy en calidad de representante del Consejo Superior. Estoy en calidad de científico de origen andaluz, con cierta experiencia en Doñana y con los méritos que hayan parecido adecuados a quienes me nombraron. Sin duda el Consejo Superior debe estar representado. Lo que espero es que con este cambio de enfoque, con poner a un científico al frente del Consejo de Participación de Doñana, el que gane sea el parque Nacional.

P. Desde su conocimiento científico del Parque, ¿cuáles son los campos que le gustaría potenciar?

R. Hay una serie de aspectos importantes a nivel general. Uno de ellos es la conservación de la gran biomasa del parque y, por supuesto, apoyar la labor científica. Recientemente, el Ministerio de Educación y Ciencia ha hecho de la Estación Biológica de Doñana un sitio de referencia científica internacional al convertirlo en una Instalación Científico Técnica Singular. Hay otras cuestiones que me gustaría tratar en su momento, y es la posibilidad de hacer de Doñana, un centro de seguimiento de problemas de gran importancia, como es el cambio global o el nivel de carbónico en la atmósfera, que afecta a toda la biosfera. Allí, por sus características singulares, por ser un sitio muy bien estudiado y catalogado, sería un sitio privilegiado para hacer un seguimiento a través del estudio de diversos animales u otros parámetros.

P. ¿Será fácil lidiar con todos las administraciones y grupos representados en el Consejo de Participación (municipios, ecologistas, empresarios...) y sus respectivos intereses?

R. Yo entiendo que todos los grupos que están representados en el Patronato están interesados en el mantenimiento del Parque lo mejor posible y en su buena gestión. En ese sentido no veo por qué va a ser difícil ponernos de acuerdo. Seguramente habrá cuestiones opinables o que pueden dar lugar a algún debate. Pero si uno mira desde un punto de vista global lo que es el Parque Nacional y el patrimonio que representa para Andalucía y la zona en cuestión, todas estas personas e instituciones estarán en la misma línea para llegar a soluciones sensatas, y en las que, más o menos, todos estemos de acuerdo. No tiene por qué haber un choque de intereses entre un desarrollo sostenible de la zona y un mantenimiento de Doñana. Hay leyes y normas que hay que cumplir y aseguran que se mantiene el entorno.

P. ¿En qué consiste el trabajo de este nuevo organismo que se crea?

R. Lo que pretende este Consejo de Participación es asegurar que cada una de las instituciones que están representadas ahí cumplan su función y cometido. Por otro lado hay una serie de cuestiones que son de nuevo cuño o nueva índole que a mí me gustaría mucho que se activasen. Así, entre las funciones que tendría este Consejo de Participación, no estaría sólo el control de los distintos agentes sociales, sino además, podemos impulsar nuevas actuaciones que tienen aplicaciones de más largo alcance, como es el del cambio climático.

P. ¿En qué puede variar la descentralización del control de los Parques Nacionales sobre la gestión de los mismos?

R. Es difícil de saber todavía. En todo caso yo creo que descentralizar es una cosa buena en general. Que las decisiones sobre el Parque Nacional de Doñana se tomen en el entorno del mismo, es decir en Andalucía, me parece bien. Es una ley nueva y esperemos que mejore la anterior. Pero todavía es difícil saberlo, habrá que esperar uno o dos años. Pero soy optimista porque claramente la Consejería de Medio Ambiente tiene un interés en este tema.

P. ¿En qué condiciones le gustaría a usted dejar el Parque Nacional de Doñana?

R. El Parque es hoy en día un patrimonio andaluz y nacional extraordinario. Y su situación ha ido mejorando en cuanto a su gestión y su conservación. Lo que me gustaría es dejarlo, gracias a los méritos de los magníficos científicos y gestores que allí trabajan, como un lugar de referencia mundial en cuanto a bioconservación y mantenimiento del medioambiente. Un lugar en cabeza en los estudios de la vida animal y de la ecología. Y volcado en cuestiones más generales, como el del cambio global.