Cuatro muertos en distintas carreras disputadas en España

Tras un fin de semana en el que, en Japón, Fernando Alonso acaricia su segundo título mundial de Fórmula 1, cuatro pilotos fallecieron en España en distintos campeonatos de ámbito nacional y regional. El último de ellos fue Rubén Torres, motociclista español de 18 años y residente en Rubí (Barcelona) que se accidentó nada más comenzar la carrera de Supersport correspondiente al Campeonato de España de Velocidad que se disputó ayer en Montmeló. Al igual que ocurrió en el pasado Gran Premio de Cataluña de MotoGP, en el que varios pilotos se vieron involucrados en una melé al final de recta, Torres salió despedido de su Honda y, al caer al suelo, fue arrollado por dos motos de sus rivales. A pesar de ser atendido en la clínica del circuito y ser posteriormente trasladado, en helicóptero, al Hospital General de Cataluña, en Sant Cugat, Torres falleció debido a las importantes lesiones que acusó en el tórax y en el cráneo. Evacuado el piloto del asfalto, la carrera se inició de nuevo y Jordi, hermano de Rubén terminó en segunda posición.

Las circunstancias del accidente de Torres recuerdan a las que envolvieron, hace un año y tres meses, al del piloto Xavier Fabra. El francés, de 45 años, falleció el año pasado durante las 24 Horas de Motociclismo de Montmeló cuando, al igual que le ocurrió a Torres, perdió el control de la Suzuki que pilotaba, cuando circulaba a 180 kilómetros por hora y se golpeó contra las vallas de protección. También ayer, pero lejos de Montmeló, durante la Subida a Urraki (Guipúzcoa), un piloto de 35 años y cuyas iniciales son J.U.U, según la Policía, murió al perder el control de su Reynard 3000 por causas desconocidas. El conductor falleció en el acto y las asistencias médicas sólo pudieron certificar su muerte.

Subida al Tamaimo

Durante el sábado fueron dos los pilotos que perdieron la vida, ambos también en coche. Raúl Javier León, de 35 años, se estrelló contra un muro mientras disputaba la Subida al Tamaimo, una prueba valedera para el campeonato de Canarias de montaña. El Citroën ZX del corredor tinerfeño se salió de la carretera en el municipio tinerfeño de Puerto de Santiago y se golpeó violentamente contra un muro de rocas. A pesar de intentar reanimarle, los servicios sanitarios no pudieron salvarle la vida. La prueba se suspendió en señal de luto por decreto de los demás participantes. También el sábado pero en Fuerteventura, el copiloto José Antonio Rodríguez falleció al ser atropellado por Juan Antonio Montenegro, su compañero de equipo. Por causas desconocidas, Rodríguez salió despedido del coche, que estaba llevando a cabo una maniobra de marcha atrás, en plena zona del barranco del Pilón, situado en el Puerto del Rosario. Al lugar del accidente acudieron dos ambulancias y algunas unidades del cuerpo de bomberos, que atendieron al copiloto herido y le practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar que a la postre resultaron infructuosas.