Química con Siemens
Siemens es posiblemente la mayor empresa industrial de España. De su organigrama cuelgan divisiones de equipos para automóviles, seguridad, telemedicina, energía, trenes... Así que el nuevo consejero delegado de la multinacional alemana en España tiene que ser alguien versado y versátil en un amplio abanico de disciplinas y de mercados. Ése dicen que es el caso de Francisco Belil Creixel, ingeniero industrial, ligado al sector químico desde los comienzos de su vida profesional y hasta familiar.
Catalán, de 60 años, ha desarrollado toda su carrera profesional en la multinacional Bayer, en la que ingresó en 1972, desempeñando diversas funciones en varias fábricas alemanas, y más tarde, en EE UU y México. En 1989 regresa a España y desempeña varios cargos hasta ser nombrado en 1996 consejero delegado de Bayer Hispania. Desde el año 2000 es miembro del Consejo de Administración de Siemens y presidente de la Federación Empresarial de la Industria Química Española (FEIQUE) y presidente de la Cámara de Comercio alemana para España.
Belil tiene un handicap importante ya que sustituye en el cargo a Eduardo Montes, que fue designado responsable de la división mundial de Comunicaciones de la multinacional, tras estar 11 años al frente de Siemens España. Entre las asignaturas que le ha dejado en el cajón su predecesor está la de poner en la vía de la línea del AVE Madrid-Barcelona el tren de alta velocidad de la marca alemana, que debía estar circulando desde octubre de 2003. El nuevo consejero delegado tiene que manejar un grupo industrial que vende 2.700 millones de euros al año y cuenta con más de 5.000 trabajadores.
Esconde celosamente su vida privada y sus aficiones, aunque se declara melómano, y es asiduo del Palau de la Música y del Liceu de Barcelona. Su despacho también estará bien decorado, porque es un entusiasta del interiorismo, y los que le conocen creen que, en el fondo, es un arquitecto frustrado.
Su principal tarea será seguir logrando contratos, en particular en sectores altamente inversores, como el de telecomunicaciones (despliegue de la red de tercera generación), energía (centrales de ciclo combinado) y transporte ferroviario (nuevas líneas de AVE, Cercanías y Regionales). Con Belil, la imagen de Siemens será menos notoria, pero también menos conflictiva: el nombre de la marca ha pasado a un segundo plano en las camisetas del Real Madrid.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.