La policía investiga a Cherie Blair por simular que propinaba un cachete
Un muchacho le puso 'cuernos' para una foto
Cherie Blair, la esposa del primer ministro británico, Tony Blair, ha sido investigada por la policía por fingir que iba a darle una bofetada a Miles Gandolfi, un adolescente de 17 años. Los hechos ocurrieron la semana pasada durante la celebración de unos juegos escolares en Glasgow (Escocia), según la cadena británica BBC. La mujer del premier estaba posando para una fotografía junto al adolescente Gandolfi cuando éste le puso "cuernos" con una de sus manos, a lo que Cherie, destacada defensora de los derechos humanos, respondió fingiendo que iba a propinarle una bofetada.
A pesar de que las fotos de los periódicos muestran a los dos protagonistas riéndose y abrazándose, las autoridades de protección del menor pidieron a la policía británica que abriera una investigación. La residencia oficial del primer ministro confirmó que la policía de Strathclyde (Escocia) había abierto una investigación, durante la que se interrogó a varios testigos, pero consideró que no se iban a tomar nuevas acciones.
La tarde del pasado domingo la policía señaló que la señora Blair había sido exonerada de toda acusación tras haber sido investigada por los mencionados hechos. Seis oficiales de la policía de Strathclyde fueron llamados para reforzar la investigación, y después de recoger numerosos testimonios han cerrado las pesquisas. La madre de Gandolfi señaló al Mail on Sunday que la cosa no era para tanto, que no pensó que el asunto tomara tales proporciones, y estimaba que se estaba exagerando porque simplemente había sido un "pequeño cachete".
Mientras tanto, el joven Gandolfi manifestó: "No sé por qué lo he hecho, era un truco divertido". Y añadió que no pensaba que el gesto causase ningún problema, no alcanzaba a pensar que la policía quisiese hablar con él por el incidente y su reacción fue de incredulidad. Según Gandolfi, la misma Cherie Blair, al darse cuenta de la broma, le dio unos golpecitos en la espalda y le dijo: "Has tenido la suerte de que tengo buen sentido del humor".
"No pensamos que esté prevista ninguna otra acción", señaló el oficial de seguridad de la señora Blair, mientras Bill Aitken, miembro del partido conservador del Parlamento autónomo de Escocia, en la oposición, señalaba que este asunto "lleva todas las trazas de una monumental pérdida de tiempo para la policía".
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